Noticias Tenerife Así es el hotel donde se alojaron Ava Gardner, Winston Churchill o Agatha Christie

Así es el hotel donde se alojaron Ava Gardner, Winston Churchill o Agatha Christie

Punto de encuentro de la alta sociedad grancanaria, refugio de innumerables celebridades, mecenas cultural, con 130 años, Santa Catalina, a Royal Hideaway Hotel, comparte su historia a través de sus estancias que recuperan el esplendor y la excelencia de un hotel de lujo clásico.

El hotel Santa Catalina fue declarado Monumento Histórico y Artístico de la isla, y desde su inauguración en 1889 ha sido tanto el punto de encuentro de la vida social de la ciudad, como un referente del éxito turístico de Las Palmas de Gran Canaria, especialmente a finales de los 50 y 60 del siglo XX.

La historia de un hotel escrito con estrellas

Desde 1890, el hotel fue lugar de reunión y punto de encuentro de diferentes personalidades nacionales e internacionales que hallaban entre sus paredes el lugar ideal para descansar y disfrutar de la isla con las comodidades y la discreción de un hotel de lujo.

Entre los personajes ilustres alojados en el hotel cabe destacar a la soprano María Callas, la actriz Ava Gardner, el actor Gregory Peck durante el rodaje de Moby Dick, o diferentes personalidades británicas atraídas por el origen británico del hotel como el mandatario Winston Churchill, el Príncipe Carlos de Inglaterra o la dramaturga Agatha Christie.

Entre los huéspedes nacionales se encuentran los miembros de la Casa Real, los ex presidentes del gobierno Felipe González y José María Aznar o artistas de la talla de Julio Iglesias o Lola Flores.

Un oasis de lujo atemporal en el corazón de Gran Canaria

Inaugurado en 1890 por el arquitecto británico James MacLaren, el hotel ha formado desde entonces parte de una larga tradición turística en la capital grancanaria. No solo es el hotel más antiguo de Las Palmas de Gran Canaria sino de todo Canarias.

Gracias a su privilegiada ubicación en la zona residencial Ciudad Jardín, en el mismo centro del Parque Doramas, se convirtió en un punto de referencia turístico y social, especialmente a finales de los años 50 y los 60.

El establecimiento fue adquirido por el Ayuntamiento en el año 1923 y, en 1951 se inauguró el nuevo edificio diseñado por el reconocido arquitecto grancanario Miguel Martín-Fernández de la Torre, cuyo sello se conserva hasta la fecha.

Actualmente, forma parte del Patrimonio Arquitectónico y Cultural de la capital canaria siendo uno de los ejemplos más significativos del movimiento arquitectónico regionalista del siglo XX.

- Publicidad -spot_img

Articulos anteriores