FAADA lleva años pidiendo a la Generalitat el decomiso del animal y ya cuenta con diferentes opciones de santuarios para ella.

Dumba es una elefanta asiática utilizada en circos de todo el mundo. Cuando no trabaja, vive sola en el jardín de su propietaria en Caldes de Montbui. FAADA ha podido comprobar que estas instalaciones son ilegales. La Fundación ha pedido a la Generalitat de Catalunya que decomise urgentemente a Dumba y ya cuenta con varias opciones de santuario para ella.

Después de años de investigación en el que las administraciones implicadas, la Generalitat de Cataluña y el Ayuntamiento de Caldes de Montbui se han mostrado poco colaboradores, FAADA ha podido comprobar que la instalaciones donde vive Dumba son ilegales.

El 13 de febrero de 2014, a petición de la Fundación, la Comisión Técnica de Inspección de Núcleos Zoológicos con Fauna Salvaje se personó en dichas instalaciones, constatando diversas irregularidades, también relacionadas con el bienestar del animal, yconcediendo 6 meses para que la titular de las mismas, realizara los cambios necesarios y previstos en el Anexo de la Orden de 23 de diciembre de 1991.

A pesar del plazo de 6 meses, después de 4 años las instalaciones seguían en las mismas condiciones.

Después de mucha insistencia, FAADA ha conseguido que en mayo de 2018 se realice una nueva inspección, pero los técnicos no han abierto expediente sancionador ni procedido al decomiso de la elefanta tal y como le permite el artículo 3 de la Orden de 23 de diciembre de 1991.

Esto es especialmente grave ya que, según ha podido constatar FAADA, la instalación del recinto donde se encuentra Dumba no sería susceptible de aprobación ya que no respeta las determinaciones urbanísticas vigentes.

Además, FAADA sigue pendiente de recibir información sobre la solicitud de licencia para la tenencia de animales potencialmente peligrosos de la dueña del animal, ya que no tiene constancia de la misma.

En definitiva, las instalaciones donde se mantiene Dumba cuando no está trabajando en circos de todo el mundo son ILEGALES, y lo son desde el día en el que se concedió el número de núcleo zoológico. Además, no se pueden legalizar ya que se encuentran sobre un suelo de interés público.

La Generalitat tiene la obligación legal y moral de actuar y proceder al decomiso de Dumba. La Fundación FAADA ya cuenta con varias opciones de santuarios para el animal, que tras años de explotación se merece un retiro digno.

Recordamos que Dumba es una elefanta asiática (especie incluida en el listado de especies en peligro de extinción por la IUCN) de 41 años, que fue capturada en Asia del estado salvaje cuando era una cría. Actualmente es propiedad de Yvonne Kludsky, que la utiliza en espectáculos alquilándola a circos de todo el mundo y también a empresas que ofrecen animales para el sector audiovisual. Cuando no trabaja, permanece sola, en el jardín de la familia en Caldes de Montbui.

El espacio disponible para ella –unos pocos centenares de metros que carecen de enriquecimiento ambiental– está delimitado por un pastor eléctrico (que por lo menos en una de las inspecciones que realizó la Generalitat pudo comprobarse que en ese momento no funcionaba) y un vallado perimetral de su terreno que podría permitir la entrada de una persona que quisiese acercarse al animal.

Los elefantes son animales altamente inteligentes y sociales que en la naturaleza pueden recorrer entre 20 y 50 kilómetros en un solo día, viven en grandes grupos y establecen entre ellos fuertes vínculos que duran toda la vida. Por lo tanto, simplemente la falta de contacto con otros miembros de su especie representa en sí una grave forma de maltrato para un elefante.

A la espera del último informe veterinario oficial además, preocupa el evidente deterioro físico y la cantidad de estereotipias que el animal muestra desde hace unos meses.

FAADA, ha empezado una recogida de firmas en Change.org para pedir a la Generalitat de Catalunya el decomiso del animal y así poder proceder a su reubicación en un santuario.