Los vecinos y comerciantes del municipio de Adeje, en el sur de Tenerife, han expresado su profunda frustración y preocupación ante el prolongado retraso de las obras en la Avenida Playa Paraíso que impiden el habitual tráfico vehicular. Esta vía, que lleva en obras aproximadamente seis meses, era originalmente una carretera de dos carriles por sentido con espacio para aparcamiento y es la principal ruta de acceso al Hotel Bahía Príncipe.

Uno de los vecinos afectados denunció en este periódico que “la obra va muy lenta, y hay días que no hay nadie trabajando”. Además, se ha observado que “abrieron una zanja en la carretera para meter unos tubos y demás, y lo taparon y lo dejaron así”. Esta situación ha dejado a la comunidad local “desquiciada”, debido a la falta de información por parte del ayuntamiento y los “graves problemas” que la paralización de las obras está causando.

Detallan que entre los problemas se encuentra la falta de aparcamiento, dificultades para el giro de las guaguas que van al Hotel Bahía Príncipe, coches aparcando en doble fila y bloqueando un carril, e incluso supuestas peleas en la carretera debido a esta situación. “Es preocupante que en un ayuntamiento tan importante como el de Adeje, y con hoteles turísticos con más de 500 habitaciones, tenga esta avenida en tan lamentable estado”, señalaron los comerciantes.

El Ayuntamiento de Adeje explica el retraso en las obras

Fuentes internas del Ayuntamiento de Adeje explicaron a El Digital Sur algunas razones del importante retraso. “La paralización de estas obras en la Avenida Playa Paraíso se produce porque estas pertenecen al proyecto previo de urbanización que forma parte de todo lo que se está ejecutando en el Puertito de Adeje con respecto al proyecto del complejo turístico, Cuna del Alma“.

La explicación detallada indica que las obras de canalización de aguas residuales del proyecto llegan desde Fonsalía en Guía de Isora y afectan zonas como El Callao, el Puertito y áreas colindantes, destinadas a ser conectadas para llevar su contenido a las Estaciones Depuradoras de Aguas Residuales (EDAR) y ser tratadas. “Cuando se ordenó la paralización de las obras en Cuna del Alma, estas obras de canalización también se vieron afectadas”, explicaron.

En ese sentido, aclaran que “Cuna del Alma no se ha paralizado porque el complejo en realidad no se está ejecutando, lo que se estaba ejecutando es la obra de urbanización a la que se adhiere Cuna del Alma”, refiriéndose a que no son las obras del complejo turístico en sí las que se detuvieron, sino un amplio proyecto previo de urbanización del que se beneficia Cuna del Alma y el sur de la isla de Tenerife, al tratarse también de conexiones de fibra óptica y otros servicios importantes para la comarca.

Detallan que estas obras de urbanización las realiza el Consejo Insular de Aguas del Cabildo de Tenerife, pero que las ejecuta el Ayuntamiento de Adeje y que se obliga a los propietarios de las parcelas a desarrollarlas.

Es de destacar que uno de los factores que ha influido en la paralización de las obras en Cuna del Alma, y que ha afectado no solo obras en la Av. Playa Paraíso sino también a otros puntos del municipio, es la floración de la viborina triste, una especie cuya protección ha sido prioritaria.

Es importante matizar que el Ayuntamiento de Adeje ya ha autorizado recientemente la translocación de la viborina triste, lo que permite el desbloqueo de las obras. “En cuanto se haga la translocación, que la empresa ahora va a realizar, se reanudarán las obras”, ya que es la empresa la encargada de ejecutar la translocación de la planta protegida, aseguraron fuentes del ayuntamiento sureño a este periódico.

No obstante, el tiempo exacto para la reanudación de las obras es incierto, ya que intervienen múltiples entidades en el proceso de supervisión.

La administración adejera confía en que las obras se reanuden pronto y se completen en un par de meses, aunque no pueden proporcionar fechas específicas.

Mientras tanto, los vecinos y comerciantes de la zona, esperan con impaciencia la resolución de esta situación que ha afectado negativamente la actividad cotidiana y económica de la zona.