Los agentes interceptaron al conductor del vehículo tras detectar con el cinemómetro la velocidad a la que circulaba.

La intervención se realizó en el kilómetro 12,300 de la LP-3, dentro del túnel que une ambas vertientes de la isla.

La Guardia Civil ha instruido diligencias en las que investiga a J.R.M., de 31 años, como presunto autor de un delito contra la seguridad vial, por exceso de velocidad. Los agentes lo detectaron cuando conducía su turismo a 182 kilómetros por hora, en la carretera LP-3 a la altura del kilómetro 12,300 en sentido Santa Cruz de la Palma.

Los hechos ocurrieron durante la mañana del pasado día 28 de febrero, cuando un turismo que circulaba por el túnel nuevo de la cumbre, a la altura del término municipal de Breña Alta, fue captado por el equipo de control de velocidad del Destacamento de Tráfico de la Guardia Civil en La Palma a una velocidad de 182 kilómetros por hora, según el cinemómetro que estaban operando, por lo que se pasó inmediato aviso a otra patrulla para que procedieran a la identificación del conductor del vehículo infractor.

Esta velocidad supera en 92 kilómetros por hora la permitida en ese tramo, que cuenta en su inicio con una limitación específica por túnel, de 90 kilómetros por hora, reforzada en los correspondientes paneles luminosos variables existentes en el interior del mismo.

Este delito puede suponer una pena de prisión o una sanción económica y la privación del permiso de conducción de uno a cuatro años.

Las diligencias instruidas han sido entregadas en el Juzgado de Instrucción de Guardia de Santa Cruz de la Palma.

Estos controles se enmarcan dentro de la estrategia operativa de seguridad vial 2011-2020 de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil, cuyos objetivos son: reducir las cifras de siniestralidad vial en unas carreteras que registran mayor movilidad cada año, aplicándolo a la intensificación de los principales factores de riesgo entre los cuales destacan los excesos de velocidad y las distracciones.

Se están potenciando las verificaciones de velocidad en el interior de los túneles de la isla, tras detectarse un incremento de excesos de velocidad en los mismos, con el consecuente riesgo para la circulación vial.