La sociedad ServiTaxi, que une a las asociaciones de taxis de Guía de Isora, Arona y San Miguel, se reunió con representantes de los 3 municipios en busca de apoyo para la modernización del sector.
El sector del taxi en Tenerife no está pasando por su mejor momento. A los conflictos de licencia y rescate en Santa Cruz se le suma la difícil situación económica que sufren en toda la isla. Los cambios en las costumbres de los usuarios y la competencia que ejercen otros servicios han motivado que la sociedad ServiTaxi reclame ayuda a las administraciones públicas.
Tras la negativa del Cabildo, la sociedad ha recurrido a los Ayuntamientos de Arona, San Miguel y Guía de Isora en busca de ayuda. Piden que los consistorios locales se impliquen en la modernización del sector. Al término de la reunión el representante de ServiTaxi, Pedro Luis Hernández, explicó “nosotros estamos poniendo de nuestra parte, hace poco estrenamos la app 1Taxi!, que nos acerca a nuevos mercados, pero no podemos ir solos en esta tarea”. Los taxistas piden ayuda a la hora de actualizar su gestor de reservas y la página de facturación, herramientas que les permitirán ser más eficientes.
Para la edil isorana de Transportes, Carmen Alicia González, este tipo de reuniones “son necesarias, porque nos dan una idea exacta de las necesidades de un sector que sabemos que hay que proteger. Son muchas las familias de la comarca y del municipio que dependen de un taxi y nuestro compromiso es ayudarles”.
Por su parte, el concejal de Transportes de Arona, Leopoldo Díaz, señaló que “la modernización en el sector es fundamental para que puedan adaptarse a las nuevas fórmulas de movilidad y que un sector que siempre ha sido un referente en el transporte, siga siendo competitivo”.
Desde el área de transportes de San Miguel, la edil responsable, Dora González Brito destacó que “la modernización del sector del taxi es vital. Son nuestra carta de presentación para el turismo, y en estos momentos están atravesando dificultades debido a la competencia de otros sistemas de transporte. En el caso de San Miguel, unas 80 familias dependen del taxi, añadió”.
Al término de la reunión tanto los representantes municipales como los taxistas salieron razonablemente satisfechos con la intención de volver a reunirse tras el estudio detallado por parte de los equipos de gobierno municipal.
