El Cabildo de Tenerife ha llevado a cabo la plantación de más de 30.000 árboles con el objetivo de recuperar las áreas afectadas por el devastador incendio de 2023, lo que representa una acción histórica en los montes de la Isla.
La presidenta del Cabildo, Rosa Dávila; la consejera de Medio Natural, Sostenibilidad y Seguridad y Emergencias, Blanca Pérez; el director insular de Medio Natural, Pedro Millán; el alcalde de El Sauzal, Mariano Pérez; y la técnica del servicio de Planificación y Proyectos Forestales, Eva Padrón, visitaron hoy (lunes 17) los trabajos realizados en las cercanías del área recreativa de Las Calderetas (El Sauzal), participando en una actividad de repoblación forestal.
Rosa Dávila ha detallado que “llevamos ya plantados más de 30.000 ejemplares y el objetivo es plantar 40.000 especies a finales de febrero. En concreto, en esta vertiente norte de Tenerife la idea es reforestar unas 500 hectáreas”.
La presidenta del Cabildo ha añadido que “estamos quitando pino radiata, que es una especie foránea, y plantando monteverde, que son especies autóctonas y más resistentes al fuego, así como algunas especies no arbóreas como el bicácaro (Canarina canariensis), que es una especie característica de zonas de laurisilva”.
Blanca Pérez destaca que la repoblación de especies de monteverde cumple con un doble objetivo: “Por una parte, se recupera con especies autóctonas una parte del monte que estaba ocupada por el pino radiata, que es una especie foránea introducida, preservando de esta forma la vegetación originaria. Por otra, el monteverde actúa como un cortafuego natural ante un posible incendio, ya que sus especies aguantan y retienen la humedad, captando agua tanto de la lluvia como del mar de nubes”.
Por su parte, Mariano Pérez ha subrayado que “es importante implicar a la ciudadanía en estas actividades, ya que así tienen la oportunidad de conocer nuestras especies y las labores que se están haciendo para recuperar el monte afectado por el incendio.”
Las intervenciones se están llevando a cabo en el pinar de Monterrey (Pinus radiata), que abarca un total de 505 hectáreas en los municipios de El Sauzal, La Matanza, La Orotava, La Victoria, Los Realejos, Santa Úrsula y Tacoronte. Estas acciones implican una inversión aproximada de 1,5 millones de euros y están siendo ejecutadas por la empresa pública Tragsa.
En la zona afectada por el gran incendio de 2023, el Cabildo ha repoblado principalmente con especies arbóreas como brezo, laurel, follao, hija, vinátigo y sanguino, con el objetivo de generar una cobertura arbórea que proteja el suelo de la erosión y, al mismo tiempo, restaurar las superficies dañadas.