Los empresarios consideran que una adecuada ordenación del suelo permitiría impulsar actividades económicas y sociales.
El Círculo de Empresarios y Profesionales del Sur de Tenerife (CEST) considera imprescindible que se desbloqueen infinidad de proyectos e inversiones vinculadas al territorio, iniciativas que durante los últimos años han estado paralizadas o aplazadas por los enormes problemas y trabas que han traído consigo las leyes de ordenación. En este sentido, desde el CEST se entiende que es inaplazable que se aborde eficazmente la regeneración y modernización de espacios como las zonas industriales. Para el Círculo de Empresarios del Sur la reactivación económica de la sociedad post COVID-19 pasa por una necesaria mejora en la gestión del territorio. Empresarios y profesionales recuerdan que, lejos de limitarse a la apuesta por la construcción, una adecuada ordenación del territorio constituye una herramienta tremendamente eficaz para impulsar actividades económicas y sociales que se desarrollan en el mismo.
A juicio de los empresarios, es fundamental desbloquear proyectos que durante estos meses de inactividad -consecuencia del estado de alarma- permitirían sentar las bases de un impulso económico que no dependa exclusivamente del sector turístico. En esa dirección, el CEST ve en algunos planes de ordenación un obstáculo a veces insalvable para desarrollar inversiones que a corto y medio plazo podrían generar miles de puestos de trabajo.
Empresarios y profesionales reiteran la necesidad de que se sienten las bases para la reapertura de la actividad turística, pero advierten que la reactivación económica, después de la parálisis sufrida, ni debe ni podrá depender exclusivamente del sector turístico. El CEST cree urgente que las distintas Administraciones se doten adecuadamente de equipos técnicos y profesionales, porque de otra manera no se logrará el objetivo de impulsar proyectos importantes para la reactivación económica.
El Círculo de Empresarios del Sur afirma que los problemas históricos que las Islas arrastran en su gestión del suelo exigen, entre otras prioridades, que los responsables públicos entiendan que el urbanismo constituye una ventana de oportunidad vinculada a las actividades que se desarrollan en el territorio. La inflación normativa y los constantes bloqueos administrativos han generado, a juicio del CEST, innumerables ejemplos de desinversión, con la consiguiente huida de capitales e inversores a regiones que les ofrecen una mayor seguridad jurídica y eficiencia administrativa. Empresarios y profesionales afirman que, especialmente en estos momentos de crisis, deben generarse las condiciones para que Tenerife, y Canarias, vuelvan a ser una opción atractiva para los inversores.
El CEST considera que si la Administración no tiene capacidad para impulsar los planes o la gestión de licencias debe externalizar esos cometidos, agilizando de esa manera trámites de los que dependen miles de puestos de trabajo.
Otros sectores, como el de la energía fotovoltaica, deben desempeñar a juicio del CEST un papel esencial en momentos de crisis, dadas sus condiciones para consolidarse como uno de los motores que la economía demanda ahora más que nunca, objetivo que debe promoverse con incentivos fiscales que hagan atractiva la inversión. En esa dirección, se propone que se facilite la construcción de plantas fotovoltaicas, así como la eliminación de las trabas que impiden su ejecución en plazos razonables.