Los detenidos pertenecían a un clan conocido de la zona y se les considera responsables de un naufragio sucedido el pasado mes de febrero en el que fallecieron cuatro personas.
Sus víctimas, en su mayoría menores marroquíes, eran captados en Ceuta y trasladados a la península previo pago de 2.500 euros.
En la operación, en la que han participado 150 policías nacionales de distintas especialidades además de EUROPOL, se realizaron siete entradas y registro, incautándose cinco armas de fuego, abundante munición, un GPS, 150 bidones que contenían 5500 litros de combustible, tres embarcaciones, 1380 libras esterlinas, 710 euros y diversa documentación
Agentes de la Policía Nacional han detenido a 20 personas dedicadas al tráfico ilegal de migrantes en embarcaciones entre el norte de África y España. Los detenidos pertenecían a un clan conocido de la zona y se les considera responsables de un naufragio sucedido el pasado mes de febrero en el que fallecieron cuatro personas. Sus víctimas, en su mayoría menores marroquíes, eran captados en Ceuta y trasladados a la península previo pago de 2.500 euros. En la operación, en la que han participado 150 policías nacionales de distintas especialidades además de EUROPOL, se realizaron siete entradas y registro, incautándose cinco armas de fuego, abundante munición, un GPS, 150 bidones que contenían 5500 litros de combustible, tres embarcaciones, 1380 libras esterlinas, 710 euros y diversa documentación.
La organización criminal de origen español operaba en la comarca del Campo de Gibraltar y captaba a sus víctimas en Ceuta y ciudades marroquíes de alrededores y estaban especializados en el tráfico ilegal de seres humanos.
Todos los detenidos eran considerados muy violentos ya que no dudaban en agredir o amenazar a sus víctimas con armas de fuego en caso de retrasos o impagos en los traslados. Además, se publicitaban en redes sociales a través de vídeos musicales donde alardeaban de su estilo de vida y mostraban las armas que poseían.
La mayoría de los traficados eran menores marroquíes que pagaban 2500 euros para acceder a la península en embarcaciones con capacidad de siete a diez personas y se les considera responsables de un naufragio sucedido el pasado mes de febrero en el que fallecieron cuatro personas.
En el operativo, en el que han participado 150 policías nacionales de distintas especialidades además de EUROPOL, se realizaron siete entradas y registro, incautándose cinco armas de fuego, abundante munición, un GPS, 150 bidones que contenían 5.500 litros de combustible, tres embarcaciones, 1.380 libras esterlinas, 710 euros y diversa documentación. Las detenciones se han realizado 13 en la provincia de Cádiz y 7 en Ceuta, todos ellos por tráfico ilegal de seres humanos, 7 de ellos han ingresado en prisión.