En una tarde soleada de senderismo en Tenerife, un incidente repentino dejó a un hombre de 43 años lesionado y en necesidad de asistencia médica. El suceso ocurrió en el Sendero 39, ubicado en las Cañadas del Teide, en el municipio de La Orotava. El incidente tuvo lugar sobre las 13:04 horas, y desencadenó una rápida respuesta por parte de los servicios de emergencia locales.
Tras recibir una llamada de alerta, el Centro Coordinador de Emergencias y Seguridad (CECOES) 1-1-2 del Gobierno de Canarias se puso en acción de inmediato. La gravedad de la lesión requería la intervención de varios servicios especializados para llevar a cabo el rescate y proporcionar atención médica al senderista herido.
El Consorcio de Bomberos de Tenerife fue uno de los primeros en responder a la llamada de emergencia. Junto a ellos, se movilizaron otros servicios, incluido el Parque Nacional del Teide y el Grupo de Emergencias y Salvamento (GES) del Gobierno de Canarias, que dispuso un helicóptero de rescate para asistir en la operación.
El Servicio de Urgencias Canario (SUC) envió una ambulancia de soporte vital básico para trasladar al senderista lesionado al Hospital Universitario Nuestra Señora de La Candelaria. La valoración inicial del SUC indicaba que el paciente presentaba un traumatismo moderado en una extremidad inferior, salvo complicaciones adicionales.
El senderista fue localizado por el personal del Parque Nacional del Teide, quienes se encontraban en estrecha comunicación con un médico coordinador del SUC. Siguiendo las indicaciones proporcionadas por teleasistencia, los efectivos del Equipo de Rescate en Montaña de Cruz Roja, activados por el Consorcio de Bomberos de Tenerife, procedieron a valorar y asistir al herido, inmovilizándolo adecuadamente.
Una vez que el senderista estaba asegurado en una camilla, los rescatadores del helicóptero del GES, junto con los equipos de Cruz Roja y Bomberos, lo evacuaron hasta la aeronave. El helicóptero había aterrizado en una zona cercana para facilitar el traslado del afectado hasta la helisuperficie del puerto de Santa Cruz de Tenerife.
En tierra firme, el personal del SUC asumió la responsabilidad de trasladar al herido al hospital mencionado para recibir el tratamiento médico necesario. Durante todo el proceso, la Policía Portuaria garantizó la seguridad y el orden en el muelle, asegurando las maniobras de aterrizaje y despegue del helicóptero.
