La actividad quirúrgica aumenta en julio un 10,6 por ciento interanual hasta las 8.066 intervenciones.
La espera quirúrgica ha bajado un 5,56 por ciento en seis meses, la espera para una primera consulta ha descendido en 312 pacientes y la espera para pruebas diagnósticas ha descendido un 25,33 por ciento interanual.
El consejero de Sanidad del Gobierno de Canarias, José Manuel Baltar, dijo hoy en sede parlamentaria que la actividad quirúrgica ha aumentado en el mes de julio un 10.6 por ciento con respecto a los datos del mismo período del año anterior. En dicho mes se realizaron un total de 8.066 intervenciones quirúrgicas en los hospitales del Servicio Canario de la Salud, mientras que en el mismo período de 2016 se registraron 7.293.
Baltar ofreció estos datos en una comparecencia en la que expuso la actividad realizada y la situación de la lista de espera según los datos ofrecidos a 30 de junio de 2017, unas cifras que atestiguan el descenso tanto en el número de pacientes como en el número de días de espera.
Baltar expuso cuál era el escenario de las listas de espera cuando se incorporó al cargo en el Gobierno canario, para, a continuación, contrastar esas cifras con las actuales. El resultado es un descenso visible en el número de pacientes en lista de espera sanitaria y también en el número de días de espera.
Datos reales sobre el descenso en las listas
Tal y como ha explicado Baltar, en diciembre de 2016, la lista de espera quirúrgica alcanzó los 34.327 pacientes y una demora media de 181,58 días. La lista de espera de consultas fue de 70.417 pacientes, y la de pruebas, de 52.675. Sin embargo, con fecha 30 de junio de este año, esos números han descendido considerablemente.
La lista de espera quirúrgica estructural ha bajado hasta los 32.419 pacientes, lo cual supone un descenso de 1.908 personas, o un 5,56 por ciento menos en solo seis meses.
En cuanto a la espera para una primera consulta, la cifra se ha reducido desde diciembre en 312 pacientes hasta los 28.052, lo cual representa una bajada del 1 por ciento.
Siguiendo el criterio de considerar todas las especialidades y centros (hospital más Centros de Atención a las Especialidades, CAE), el número de pacientes citados en espera de ser atendidos es de 131.926, lo cual supone 12.083 pacientes menos que en junio de 2016. Esto representa un descenso del 8,4 por ciento. La actividad de consultas se incrementó en 945 pacientes más con respecto al año anterior, lo que representa un 0,06 por ciento más.
Pruebas diagnósticas y plazo medio de espera
En relación a la lista de espera de pruebas diagnósticas, el número de pacientes citados en junio de 2016 era de 33.418, por lo que, si se compara esta cifra con los datos obtenidos en junio 2017, se ha producido un descenso de 8.467 pacientes, o un 25,33 por ciento menos. De hecho, en el primer semestre de 2017 se han realizado 10.603 pruebas más que en el mismo período del año anterior (un 2,67 por ciento interanual más).
En cuanto a la demora media, se pasa de 181,58 días a 174,02, lo que se traduce en 7,56 días menos (una semana menos de espera). En consonancia con este dato, el número de pacientes con esperas superiores a 6 meses se redujo en 2.324 personas, de forma que el porcentaje pasaría del 37,34 por ciento en diciembre, al 32,37 por ciento de junio (un descenso de casi el 5 por ciento).
El consejero ha querido destacar que, “aunque estos datos de los primeros seis meses de 2017 son positivos, aún hay mucho trabajo por hacer”. Por ello, ha dicho, no puede darse por satisfecho, pero sí está convencido de que “se está trabajando en la línea correcta y aplicando medidas efectivas”. “Las listas de espera sanitarias son el principal caballo de batalla del equipo de la Consejería de Sanidad, un equipo que no cesa en su empeño de lograr arrancar cada día un paciente de esas abultadas cifras”, ha declarado.
Causas del descenso
El consejero de Sanidad ha explicado que esta reducción de las cifras se debe principalmente a las medidas impulsadas desde su departamento y que se han seguido en los hospitales del Servicio Canario de la Salud. Entre otras causas se encuentra el incremento de la actividad quirúrgica de los hospitales en jornada ordinaria, que han realizado actuaciones concretas adaptadas a cada uno de los centros y cambios organizativos que han permitido un aumento de la actividad en quirófano.
Por otro lado, la puesta en marcha de los proyectos anuales Plan Demora y CMA 24 también ha contribuido al descenso en las cifras. El CMA 24 es un programa de cirugía mayor ambulatoria, puesto en marcha en marzo, que permite una optimización de los recursos, incrementa la eficiencia en la atención a los pacientes y les evita ingresos innecesarios. Por su parte, el Plan Demora consiste en incrementar el número de intervenciones de pacientes con procesos que presentan grandes esperas, en especial en procedimientos como la obesidad mórbida y otros como los de columna y Traumatología. La clave del Plan está en realizar un seguimiento a los pacientes y en identificar cuál es el motivo de la demora registrada para proceder a su consiguiente subsanación.