El Cabildo de Tenerife, a través de la Consejería de Carreteras, garantizará la conservación de las zonas verdes en la TF-180, entre el Mirador de Vistabella y la Cervecera.

El consejero del área, Dámaso Arteaga, señala que esta decisión responde a las alegaciones presentadas por los vecinos, quienes solicitaron preservar el mayor número posible de áreas verdes y adaptar el proyecto a las necesidades de movilidad del entorno, “respetando una serie de cruces y de giros que con el proyecto inicial se eliminaba”.

En este sentido, Arteaga afirma que “a partir de ahora, se modificará el proyecto y confiamos en que el ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife, a la mayor brevedad, pueda iniciar el trámite de expropiación del suelo para comenzar con el mismo”.

El acondicionamiento previsto para la TF-180 implica una inversión de 11,5 millones de euros, de los cuales el Cabildo aportará el 73%, mientras que el Ayuntamiento de Santa Cruz asumirá el resto, conforme al convenio firmado entre ambas administraciones. El plazo estimado para la ejecución de las obras es de 24 meses.

El proyecto plantea una transformación integral de la carretera insular TF-180, que pasará a convertirse en una vía urbana. Esta reforma incluirá una reorganización del tráfico, la creación de más plazas de aparcamiento y la ampliación de las aceras, así como la incorporación de jardineras, nuevo mobiliario urbano y alumbrado.

Según Arteaga, “la carretera insular TF-180, en la actualidad, no presenta una alternativa al tráfico existente que conecta dos de los principales núcleos poblacionales de la Isla: Santa Cruz de Tenerife y San Cristóbal de La Laguna. Debido a la urbanización, se ha reconvertido en un eje de carácter más local y, por lo tanto, menos eficaz a la hora de gestionar importantes volúmenes de tráfico”.

El objetivo principal de esta intervención es adaptar el tramo de la TF-180 objeto de la obra a una calle urbana que cumpla con la normativa vigente y el Plan General de Ordenación. Además, se busca dotar a la vía de los servicios urbanos necesarios para mejorar su seguridad y comodidad. La futura carretera contará con dos carriles en dirección a Santa Cruz y uno hacia La Laguna.

Asimismo, se habilitará el máximo número posible de plazas de estacionamiento, respetando el ancho disponible, mientras que las aceras tendrán una anchura mínima de dos metros. Cuando las aceras superen los tres metros de ancho, se instalarán jardineras para garantizar un espacio libre adecuado para el paso peatonal.