La tarde del 5 de enero, San Cristóbal de La Laguna vivió una de las celebraciones más esperadas del año con la Cabalgata de Reyes, que desbordó las calles de la ciudad de magia y emoción. En una jornada llena de tradición y color, la festividad dejó un recuerdo imborrable tanto en grandes como en pequeños.

Desde primeras horas del día, alrededor de 5.000 personas se reunieron en el centro histórico para ver la llegada de Melchor, Gaspar y Baltasar. Los Reyes Magos recorrieron el tramo entre el Ayuntamiento, donde fueron recibidos por la Corporación Municipal, y la Torre de La Concepción, donde el alcalde Luis Yeray Gutiérrez les entregó la famosa llave mágica que simboliza el acceso a todos los hogares de la ciudad.

Sin embargo, el momento culminante de la jornada llegó por la tarde, cuando la Cabalgata se apoderó de las calles laguneras. Según datos de la Policía Local, el número de asistentes superó las 35.000 personas, multiplicando casi por siete la cifra de la mañana. La multitud se agolpó para disfrutar del desfile, que este año recuperó su formato tradicional después de más de tres décadas de ausencia.

Nueve carrozas adornadas con luces y colores vibrantes, acompañadas por más de 500 participantes, dieron vida a una comitiva que incluyó desde pajes reales hasta elfos y superhéroes. No faltaron los personajes infantiles, comparsas, grupos de baile, fanfarrias, malabaristas y zancudos, así como los hinchables luminosos que deslumbraron a los niños.

El recorrido se completó con espectáculos marinos y una mágica ambientación inspirada en el mundo Avatar, que ofreció muchas sorpresas a los asistentes, convirtiendo la noche en un auténtico cuento navideño.