El alcalde de Arona, José Julián Mena, presentó anoche en el Casino del Casco, al pregonero de las Fiestas Mayores en un acto en el que destacó el papel que maestras y maestros han jugado durante décadas en la educación de miles de niños del municipio y recordó la infancia que, tanto él como el propio pregonero, vivieron en las calles de Arona. 

La devoción del municipio de Arona, y muy especialmente del Casco, hacia el Cristo de la Salud, así como la importancia de la educación y el papel que ha jugado durante décadas la figura de maestras y maestros, marcaron anoche la lectura del pregón con el que se ha dado inicio oficial a las fiestas en honor al Santísimo Cristo de la Salud y a Nuestra Señora la Virgen del Rosario, las Fiestas Mayores de Arona.

En un acto celebrado en el Casino de esta localidad, el encargado de leer el pregón ha sido el maestro aronero Esteban Francisco Hernández, que ha fue presentado por el alcalde, José Julián Mena, quien ha agradecido a Hernández su aceptación y su voluntad de relatar las experiencias vividas en el municipio.

El pregonero, maestro con más de 42 años de experiencia, ha comenzado sus palabras asegurando su devoción por el Cristo de la Salud, “desde muy pequeño, cuando era monaguillo pasaba muchas horas de rodillas frente al Cristo, y ahí empezó mi gran admiración”, lo que le hizo recordar los tiempos en los que miles de peregrinos llegaban al casco histórico para celebrar el día grande.

Un pregonero con muchas experiencias a su espalda pero que, sobre todo, ha destacado las vivencias y costumbres de los años 50 y 60 en el municipio. Una época que recuerda con añoranza: “Arona es mi vida y de aquí me llevo los mejores momentos”. “Éramos muy pocos –agregó- y todos nos conocíamos. Solo había un policía, los ventorrillos de las fiestas eran de tela y los bailes nada que ver con los de ahora. No era ni mejor, ni peor. Era diferente”.

Mena: “Sin educación no puede haber futuro, progreso y libertad”

Durante su pregón, también leyó algunas partes de un periódico de 1956 que conserva. De él ha destacado la publicidad, muy distinta a la actual, y la forma de promocionar las Fiestas Mayores. El discurso acercó a los asistentes a una Arona de tradición, y con el que se despidió, asegurando que “ha sido un orgullo poder expresar con palabras lo que siento por el municipio”.

Por su parte, Mena puso en valor la importancia de la trayectoria del educador, dentro del mundo de la enseñanza en el municipio, “esas maestras y maestros que nos dedicaron buena parte de su vida merecen, no solo todo nuestro respeto, sino el más sentido homenaje del pueblo de Arona porque nos ayudaron en nuestros primeros pasos”, explicó. El alcalde también manifestó que “sin educación, no puede haber futuro ni progreso. Ni mucho menos, libertad o responsabilidad”.

El alcalde, además, subrayó la devoción que ambos sienten hacia el Cristo de la Salud y explicó que  “desde hace tres años se trabaja para devolver la importancia a las Fiestas Mayores, y hacer de ellas, un símbolo de unidad, del sentimiento de orgullo de ser de Arona, siendo un pueblo luchador que mira hacia el futuro, sin olvidar quién es y de dónde viene”.

Las 19 aspirantes a reina de las Fiestas Mayores han tenido protagonismo en este acto en el que han sido presentadas oficialmente. Un arranque de fiestas que también ha contado con espectáculo musical, a manos el Trío Beselch.