El próximo lunes se pondrá en valor la histórica contribución de los inmigrantes de más de 150 nacionalidades que, a lo largo del tiempo, han contribuido al desarrollo de este pujante municipio de Tenerife, considerado como uno de los enclaves top del turismo sostenible, accesible e inclusivo de España. Se ha decidido aprovechar una exposición que se exhibió el pasado mes de julio en el Centro Cultural de Los Cristianos, en el marco del festival Mumes, para celebrar un encuentro el próximo lunes (16 de octubre), a las 20:00 horas y con entrada libre, en el Auditorio Infanta Leonor de Los Cristianos, en el que se reunirán los 40 hombres y mujeres de Europa, Asia y África, que fueron seleccionados para dar forma a la personalidad mestiza de Arona.
Cada una de las personas elegidas recibirá, como recuerdo, una reproducción a gran tamaño de la foto y la nota biográfica bilingüe que figuró en la muestra. Este proyecto arrancó a principios de año con la intención de poner de relieve, con nombres y apellidos, el carácter plurinacional del municipio de Arona. De esta forma se seleccionaron cuarenta personas, la mitad hombres y la mitad mujeres, procedentes de cuarenta países europeos, africanos y asiáticos, a los que se entrevistó previamente para conocer los motivos que les llevaron a fijar su residencia en Arona y emprender en este lugar su proyecto humano y profesional.
En la inauguración de la muestra, que estuvo abierta hasta el 31 de julio en el Centro Cultural de Los Cristianos, Cuba, China, Venezuela, Escocia, Portugal, Noruega, Mali, Senegal, Francia, Alemania, Brasil, Marruecos… Son algunas de las nacionalidades que conviven en Arona y que estuvieron representadas en la exposición Ciudadanos del Mundo en Arona, comisariada por Martín Rivero, dentro de la XIV edición del Festival de Músicas Mestizas y +, MUMES 2017. Cuarenta rostros de nacionalidades diferentes, fotografiados por Carlos González, que estuvieron acompañados por textos del periodista Javier Cabrera, en los que se recogen sus experiencias a la hora de integrarse en la cultura tinerfeña o los motivos que los llevaron a residir en Arona, algunos por trabajo, por familia o porque se enamoraron del lugar tras visitarlo en sus vacaciones.
Otras historias son más duras, como la llegada de un joven en patera hasta las costas canarias. Todos ellos, vecinos ya de Arona, y dedicados a diferentes actividades en sectores y profesiones como la hostelería, la restauración, el comercio, alimentación, consultoría, transportes, inmobiliarias, asuntos sociales, deportes, construcción, ingeniería, esteticismo, artesanía, cultura, actividades subacuáticas o formación, coinciden en destacar la riqueza de la diversidad cultural del municipio sureño.