Tenerife Shipyards recupera un proyecto de la empresa internacional Seadrill, que realizará sus reparaciones en el puerto de Santa Cruz de Tenerife.
Tenerife Shipyards será la empresa encargada de realizar los trabajos de mejora necesarios en uno de los buques perforadores de la empresa internacional Seadrill. La adjudicación de este proyecto ha sido posible gracias a la labor del departamento comercial de Tenerife Shipyards, así como a los esfuerzos del Presidente de la Autoridad Portuaria de Santa Cruz de Tenerife, Pedro Suárez, que comparte el interés de Tenerife Shipyards en revitalizar y reactivar la actividad económica del puerto de Santa Cruz de Tenerife.
Este será el octavo proyecto asignado al grupo canario Hidramar por parte de Seadrill, quien confía en los altos estándares de seguridad laboral, calidad medioambiental y cumplimiento estricto de los plazos de trabajo que caracterizan al astillero de Tenerife.
Una inyección para la economía de la isla
Está previsto que el buque llegue desde el puerto de Las Palmas en el mes de junio, y para la realización de estos trabajos será necesario crear entre 45 y 50 puestos de empleo que, sumados a la plantilla actual de Tenerife Shipyards, supondrá casi 140 personas trabajando a la vez en este proyecto que deberá estar concluido en 50 días.
En su conjunto, el proyecto tiene un valor de 1.000.000 de euros que se inyectarán directamente en la economía tinerfeña a través de la creación de puestos de empleo, tasas de atraque, etc. Además, este proyecto también repercute de forma indirecta en la economía local, ya que será necesario realizar las tareas de aprovisionamiento del buque.
Revitalizar el puerto de Santa Cruz como objetivo
Con el objetivo de revitalizar la actividad comercial del puerto, los esfuerzos del Presidente de la Autoridad Portuaria de Santa Cruz de Tenerife han hecho posible traer este proyecto de gran envergadura en el que se realizará la conexión de sensores y válvulas para controlar el paso de fluidos en los tanques del buque, se instalará cableado que vaya desde el interior de esos tanques hasta la unidad de control, o se mejorará la zona de acomodación, lo que les permitirá duplicar los tripulantes a bordo del buque.
El superintendente del proyecto, Jonathan Rodríguez, explica que “este proyecto es complejo porque se van a realizar muchos trabajos de electrónica. Hay que realizar instalaciones nuevas que tienen que integrarse con la ya existente en el barco para asegurarnos de que todo está correctamente controlado y monitorizado”.
Compartiendo este objetivo de volver a atraer riqueza al puerto principal de la isla, Tenerife Shipyards ha solicitado públicamente la concesión de una lámina de agua con objetivo de traer un dique flotante, una estructura semisumergible que permitiría la realización de reparaciones en seco, trabajos que actualmente no se realiza en ninguno de los puertos de Tenerife. Dicha concesión, que se encuentra actualmente en información pública, permitiría atraer un mayor número de proyectos a la isla para su reparación y mantenimiento, repercutiendo de forma continuada en la economía de la isla.
En palabras de María Name, directora de Recursos Humanos de Tenerife Shipyards, “esperamos que la recuperación de este proyecto de Seadrill sea el inicio de un nuevo período de bonanza y diversidad económica para el puerto de Santa Cruz, después de estos años de escasa actividad”.
