El viceconsejero de Sector primario participó hoy en la recogida de uva en Arafo donde ha explicado que la disminución de la cantidad en un 10% en el norte se verá compensada con un incremento del 20% en el sur de la isla.
Abel Morales indicó que si Europa da luz verde a las modificaciones del POSEI propuestas por el Gobierno de Canarias, los viticultores se beneficiarán en 2019 de un incremento de 150 euros en la ayuda por hectárea, lo que supone 600.000 euros más.
La producción de uva en Tenerife se mantendrá en los niveles del año pasado -cuando la isla registro 6,26 millones de kilos bajo DOP, de los 11,15 millones del total de Canarias- según los primeros datos que han avanzado los Consejos Reguladores de Vinos de la isla a la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Aguas del Gobierno de Canarias, a través del Instituto Canario de Calidad Agroalimentaria (ICCA).
El viceconsejero de Sector primario del Ejecutivo canario, Abel Morales, participó hoy en las labores de recogida de la uva en Arafo, en una de las fincas de cultivo de Bodegas Ferrera, adscrita a las Denominaciones de Origen Valle de Güímar e Islas Canarias, donde explicó que si las actuales condiciones climatológicas no cambian, la cantidad recogida en términos globales de esta cosecha será muy parecida a la de 2017, ya que la disminución que se espera en el norte, que podría llegar en algunas zonas al 10% – donde este verano atípico, con más lluvias de lo habitual y, en consecuencia con mayor humedad, ha derivado en la proliferación de Mildiu y Oídio, también conocido como ceniza, que estropea parte de la uva- , se verá compensada con un incremento del 20% en el sur de la isla. “Según hemos podido comprobar, en ambas zonas la calidad de la producción es muy buena por lo que los viticultores son optimistas, pero tendremos que esperar al final de la vendimia para confirmar estas estimaciones”, agregó Morales.
Carmen Gloria Ferrera, propietaria de Bodegas Ferrera, comentó “que este año la vendimia llega con un retraso de unos 15-20 días en general, lo que nos permitirá repartir la recogida”, y destacó “el buen estado sanitario y calidad de la uva en este campaña”.
El viceconsejero señaló durante la visita que si Europa da luz verde a las modificaciones propuestas por el Gobierno de Canarias en el marco del Programa Comunitario de Apoyo a las Producciones Agrarias de Canarias (POSEI), los viticultores de las Islas se beneficiarán en la campaña 2019 de un incremento de 150 euros en la cuantía unitaria de la ayuda por hectárea para el mantenimiento del cultivo de vides destinadas a la producción de vinos con Denominación de Origen Protegida (DOP), que pasa de 1.650 euros a 1.800 euros como cantidad máxima, lo que se traduce en 600.000 euros más para esta medida. “Dando cumplimiento de esta manera al compromiso que asumimos con el subsector vitivinícola de las Islas de mejorar su ficha”, añadió.
Asimismo, el miembro del Ejecutivo recordó que esta semana se ha publicado la Resolución provisional de las compensaciones del POSEI adicional correspondientes a la campaña de 2011, “una demanda histórica de los agricultores y ganaderos canarios que ahora ha sido satisfecha” y que comprende tres líneas de ayuda al sector del vino de las Islas cuya ficha financiera es de 4,1 millones de euros: la citada ayuda por hectárea; a la transformación y embotellado de vinos con DOP y a la mejora de la competitividad en la comercialización exterior de estas producciones. Para poder acogerse a estos fondos los solicitantes deberán presentar la aceptación expresa de la ayuda hasta el 5 de septiembre.
“Recientemente hemos resuelto también las subvenciones del Programa de Desarrollo Rural (PDR) dirigidas a grupos de productores para apoyar la realización de actividades de información y promoción en el mercado interior por importe de 264.623 euros, cuyos beneficiaros son diez Consejos Reguladores de Denominaciones de Origen de Vinos del Archipiélago, la Asociación de Viticultores y Bodegueros de Canarias (AVIBO) y la Asociación de Apicultores de Tenerife (APITEN)”, indicó Morales, quién comentó que “es importante tener buenos vinos pero también la labor de venderlos mediante acciones como asistencia a ferias, misiones en inversas, campañas promocionales, catas y degustaciones, etc., que nos permitan situarlos en los lineales canarios y peninsulares y también en otros mercados, donde son muy valorados y cada vez tienen mayor presencia y protagonismo”.
Bodegas Ferrera
Esta bodega elabora vino embotellado desde 2007, con una producción de unos 60.000 litros al año en 16 vinos diferentes. A 1.000 metros de altitud esta familia cultiva tres fincas de producción ecológica de malvasía, albillo criollo, listán blanco, moscatel de Alejandría, listán negro, syrah y tempranillo. Su principal apuesta son los blancos y rosados afrutados, cuyas botellas tienen una serigrafía especial en su etiqueta que cambia de color cuando el vino alcanza la temperatura óptima para ser consumido.
Carmen Gloria, la matriarca, ha seguido la tradición familiar continuando la labor que hace años desarrollaron su madre y su abuela y que en actualidad comparte con su hijo, un relevo generacional muy necesario en el subsector vitivinícola. Una mujer pionera en un mundo tradicionalmente de hombres.