Los ingenieros que construyeron el Lago junto a César Manrique relataron a los asistentes anécdotas y la historia de su construcción.
La sala Andrómeda acogió, en la tarde de ayer, dentro del programa del 40 Aniversario de Lago Martiánez, el primer coloquio realizado por Alfredo Amigó y José Luis Olcina, ingenieros que diseñaron el Lago junto a César Manrique.
Con el aforo casi al completo, el evento respaldado por el Ayuntamiento del Puerto de la Cruz, contó con la presencia de Ruymán Hernández, director general de Ocio Costa Martiánez, Sandra Rodríguez, teniente de alcalde y concejala de Patrimonio y Cultura del Ayuntamiento del Puerto de la Cruz, José Alberto Martínez González, director de Secretariado de Patrocinio y Mecenazgo del vicerrectorado de la Universidad de La Laguna y Francisco Galante Gómez, director de la Cátedra cultural César Manrique de la Universidad de La Laguna.
El director general de Ocio Costa Martiánez, Ruymán Hernández inauguró el acto agradeciendo la presencia de todos las autoridades y asistentes afirmando que “estamos aquí para compartir las vivencias del Lago. Estamos orgullosos de poder afrontar este aniversario ya que el complejo ha sido durante 40 años un buque insignia del Puerto de la Cruz”.
Por su parte, la teniente de alcalde y concejala de Patrimonio y Cultura del Ayuntamiento del Puerto de la Cruz, Sandra Rodríguez, señaló que “Lago Martiánez es un enclave único en el mundo del que todos nos sentimos orgullosos. Estamos inmersos en una nueva estrategia para poner en valor las señas culturales y tradicionales que tienen esta ciudad. Se está intentando, tras la ultima reformas, mantener estas instalaciones y me gustaría poder contar con ustedes y luchar todos juntos“.
Asimismo, José Alberto Martínez González, director de Secretariado de Patrocinio y Mecenazgo del vicerrectorado de la Universidad de La Laguna señalo que “la universidad dispone de cátedras culturales y estos actos ayudan a que los valores se transmitan a todos los jóvenes. Me he enamorado de estas instalaciones desde que era pequeño y estoy agradecido por esta invitación”
Además, Francisco José Galante Gómez, director de la Cátedra cultural César Manrique de la Universidad de La Laguna matizó que “las obras de César Manrique siempre tienen una potencia y un valor en el territorio. Sin duda, este artista es un referente importante que se caracterizó en un principio por sus obras en la isla de Lanzarote”.
Tras la apertura del programa, los ingenieros Alfredo Amigó y José Luis Olcina entraron en escena para relatar, en primera persona, como surgió hace 40 años la construcción del Lago.
Intentando recordar las anécdotas más sorprendentes, Amigó relató que las instalaciones de Lago Martiánez surgieron de manera inesperada. “Estábamos dirigiendo la obra y César realizó un dibujó la planta del Lago en una servilleta. A partir de ahí, se diseño el proyecto, nos arriesgamos y se lo presentamos al Ayuntamiento”.
Sobre la escultura que tiene el Lago “le encargamos los materiales a un carpintero de La Laguna. Se rellenó de hormigón y fuimos cortando y definiéndola metro a metro. Nuestra idea es que pareciese una única pieza y se consiguió. Estoy seguro de que en cualquier ciudad esta escultura sería fotografiada”.
En relación a esto, Olcina comenzó recordando a los asistentes que en el año 1965 se tenía previsto, con Felipe Machado siendo alcalde del Puerto de la Cruz, la ejecución de una piscina artificial para aprovechar las mareas.
“El Ayuntamiento nos encargo el proyecto de las piscinas en ese periodo. Nos encontramos que todo era geométrico y rectangular por eso, se nos ocurrió la colaborar con César Manrique. Aquí se inicia esta obra de forma casual. Cesar no nos hizo caso a nuestros planos. Creo una isla, jardines a diferentes altura y aprovechó los recursos de este paisaje que tenía 7.800 metros cuadrados y que costó 50 millones”
Estableciendo un diálogo entre ellos, Amigó relató a los asistentes que fueron 7 meses de duro trabajo. “El proyecto inicial no contaba con la sala de fiestas se nos ocurrió a medida que avanzábamos. Además, nadie sabe que existe un túnel que va por debajo de todo el Lago y entran todos los materiales y el servicio. A César le parecía muy importante y realizo dibujos y formulas matemáticas para lograrlo”
Para finalizar el acto, los ingenieros realizaron una descripción de las características de Manrique destacando su sentido vitalista, su integración en el paisaje, su respeto por la arquitectura tradicional empleando diseños originales y por eso, lo definen como un artista creativo con mucha genialidad.