El centro hospitalario está acreditado por la SEGO para formar a especialistas en la realización de ecografías obstétricas y ginecológicas.
La Unidad de Medicina Fetal (Diagnóstico Prenatal y Terapia Fetal) del Hospital Universitario Materno Infantil de Canarias, centro adscrito a la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias; con un equipamiento tecnológico de vanguardia y constituido por profesionales acreditados para la formación en ecografía por la Sección de Ecografía de la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia, realiza cada año una media de 8.000 pruebas ecográficas.
Según asegura la responsable de Medicina Fetal del centro hospitalario, la doctora Margarita Medina, más del 95 por ciento de las anomalías fetales son diagnosticados por nuestra Unidad. La especialista insiste en que el resto no se pueden identificar al tratarse de anomalías de muy difícil detección o por factores que imposibilitan el diagnóstico como la obesidad (indice masa corporal superior a 30) de la gestante.
En la actualidad, la Unidad de Medicina Fetal, dispone de seis médicos especialistas en Ginecología y Obstetricia (con el nivel más elevado de la especialización en ecografía, un especialista en neurosonografía fetal y uno especializado en ecocardiografía fetal), un genetista clínico, una enfermera y un auxiliar administrativo, además cuenta con cinco ecógrafos de alta definición, equipamiento que posibilita la asistencia con ecografía en tres dimensiones y cuatro dimensiones.
Durante el primer trimestre, 11-14 semanas, la Unidad realiza el cribado de anomalías cromosómicas ( con una tasa de detección del cien por cien en el Síndrome de Down), la detección de la preeclampsia, malformaciones fetales, prematuridad y el retraso del crecimiento intrauterino, de esta manera la gestante de alto riesgo se somete a un control prenatal durante los primeros meses de embarazo.
En el segundo trimestre, 20-22 semanas, se reevalúa el riesgo de alteraciones cromosómicas, se evalúa el riesgo de parto prematuro, se realiza el cribado de malformaciones físicas y se descartan anomalías fetales mayores, se realiza ecografía de arterias uterinas y se mide la longitud cervical. Además de realizar un seguimiento del funcionamiento de la placenta y el bienestar fetal.