Iván Gea, administrador de fincas que tuvo que lidiar con los siniestros de cientos de comunidades tras el terremoto de Lorca, establece analogías con el desastre de La Palma para ofrecer pautas.
El Colegio de Administradores de Fincas de Santa Cruz de Tenerife y los administradores de fincas de La Palma, en particular, nos enfrentamos a una situación profesional absolutamente novedosa en la gestión de daños en las comunidades por la crisis volcánica y otras circunstancias que afectan a la habitabilidad de las viviendas, pero podemos establecer algunas analogías con otros desastres naturales.
No en vano en nuestro haber profesional están otros grandes eventos extraordinarios, como fue la gestión de los seguros y las indemnizaciones, y obras posteriores en edificios y viviendas, tras la riada catastrófica de Santa Cruz en 2002.
En todo caso, a nivel nacional contamos con todo un referente en el ámbito de la gestión de catástrofes por los administradores de fincas colegiados, que es Iván Gea, colegiado de Murcia y consultor, a raíz de su experiencia en la siniestralidad de cientos de comunidades tras el terremoto de Lorca (2011).
“En un terremoto o en una inundación, las actuaciones de emergencia para recuperar la habitabilidad y devolver el inmueble a la situación previa a la catástrofe natural, son sin lugar a dudas consorciables”, asegura Iván Gea. Y explica que “por analogía, si en un terremoto las actuaciones de emergencia, como el desescombro y eliminación de elementos de peligro se indemnizan sin problema, o en una inundación la limpieza del lodo, en el caso de la erupción del volcán, la limpieza de cenizas y la revisión y actuación sobre aquellos elementos que se puedan ver perjudicados, sin duda, también lo sería”.
Y recuerda que en las primeras semanas del terremoto de Lorca dio de alta en el Consorcio de Seguros los siniestros en todas las comunidades que administraba, “aunque no supiésemos ni los daños que tenía el inmueble. Posteriormente, se fue haciendo esa valoración, que en muchos casos pudo durar meses”. Por lo que aconseja “dar de alta todos los siniestros para, como poco, solicitar la indemnización por el incremento de limpieza, y no cerrar el expediente hasta la vuelta a la normalidad”.
Iván Gea subraya la importancia de ir comunicando novedades sobre el inmueble a los vecinos (“hemos dado de alta el siniestro”, “nos han abonado x para la limpieza”, “las terrazas han sido revisadas”). “Controlar un intangible tan enorme como el miedo a perder su hogar se compensa con información continua. Y es la forma de ayudar a muchas personas”.
Dentro de esta información, cree es muy importante dejar claro a los propietarios afectados que “la indemnización es un derecho, y por tanto no queda a criterio de la potencial aprobación de un plan de ayudas, esperar a que haya presupuesto… Es decir, “si hay un seguro adecuado, tendrán una indemnización adecuada, y de eso se encargará su administrador. Por analogía, lo mismo para los propietarios de viviendas unifamiliares”.
De cara a un posible siniestro total del inmueble sugiere avanzar algunas acciones:
- Revisar los condicionados de las pólizas.
- Poner especial cuidado en la revisión de las cláusulas de inhabitabilidad y pérdida de alquiler, que serán las que ayudarán a los vecinos a pagar un potencial alquiler alternativo a su vivienda, o a mantener los ingresos de su vivienda alquilada.
- Averiguar qué propietarios no disponen de seguro, y que se apoyarán en cubrir el continente de su vivienda a través de la póliza comunitaria.
- Si no hay destrucción del inmueble, y es recuperable, la indemnización llegará a la comunidad, pero si el edificio es irrecuperable la indemnización llegará a cada uno de los propietarios.
Solo si el siniestro se enquista, recomienda contratar a un perito de parte. “Siempre hay tiempo para contratar un perito que se entienda con el del Consorcio o, llegado el caso, con el perito tercero designado por el juzgado.
Iván Gea participó en el Encuentro en Canarias de Administradores de Fincas que celebramos en El Hierro en 2015, precisamente sobre la gestión de desastres naturales, compartiendo foro con el vulcanólogo Nemesio Pérez, y la delegada en Canarias del Consorcio de Seguros, Samantha Bassi.
Y participará próximamente en una formación que está organizando el Colegio para aclarar dudas, y abierta a la ciudadanía, de cuya fecha informaremos en breve.