La Institución insular conmemoró con un minuto de silencio el centenario de la mayor tragedia marítima civil de España.

Antonio Morales lamentó que aún haya miles de personas en el planeta que pierden la vida buscando nuevas oportunidades.

El Cabildo de Gran Canaria ha colocado hoy las banderas a media asta en recuerdo de los 488 canarios fallecidos en el naufragio del Valbanera, la mayor catástrofe naval civil de la historia del Estado español que tuvo lugar hace exactamente 100 años.

El presidente de la Institución insular, Antonio Morales, recordó durante el acto de homenaje que quienes perdieron la vida frente a las costas de La Habana eran personas humildes, especialmente jóvenes, que emigraban a Cuba porque en su tierra no había posibilidades para subsistir, ya que partían de unas Islas Canarias en las que había pobreza, marginación y falta de oportunidades.

Lamentó que un siglo después de este “dramático hecho”, este tipo de situaciones se sigan viviendo hoy en diferentes puntos del planeta, en los que miles de personas pierden la vida, ya que la inmigración y la búsqueda desesperada de oportunidades se producen por la desigualdad, los efectos del cambio climático y las situaciones de violencia.

“No podemos perder de vista la situación que viven hoy distintos lugares de nuestro planeta con la que vivieron nuestros antepasados hace un siglo”, puntualizó Morales, quien agregó que es necesaria una reflexión. Puntualizó además que “hoy tenemos la obligación de buscar nuevas oportunidades y nuevos modelos alternativos para nuestra economía, ya que solo de esa manera evitaremos que los hombres y mujeres tengan que abandonar a sus familias y a su patria para buscar otras oportunidades”, apuntó.

El naufragio del buque Valbanera es la mayor tragedia de la navegación civil en España y nunca ha tenido la trascendencia mundial de otros accidentes marítimos, lamentó Morales, aunque agregó que a los canarios se les ha quedado como una huella indeleble en el sentir colectivo, porque fue un drama que afectó a cientos de familias.

Por ese motivo, el acto organizado en el Cabildo junto a distintas asociaciones quiso rendir un homenaje, con un minuto de silencio, a la memoria de los fallecidos, a sus familias y a todos aquellos que sufrieron ese “drama terrible”, concluyó el presidente insular.