El objetivo es disminuir la concentración de pacientes y proteger a los profesionales y población de mayor riesgo.
La Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias, a través de la Dirección General de Programas Asistenciales, ha procedido a la reorganización de la actividad de las Gerencias Hospitalarias, Atención Primaria y Servicios Sanitarios en Canarias debido a la situación de pandemia por el coronavirus Covid-19. El objetivo es el de disminuir la concentración de pacientes en los centros, especialmente en aquellos más sensibles, protegiendo la salud de los profesionales y del conjunto de la población.
En lo que respecta a la Atención Primaria, se mantiene la actividad de consultas mientras no se modifique la situación actual. El 012 recogerá en su aplicativo la posibilidad de que el paciente realice la consulta de demanda vía telefónica, siendo los profesionales en el horario previsto los que realicen el contacto telefónico con el propio paciente.
Las consultas programadas y de seguimiento de los distintos programas de salud se sustituirán por consulta telefónica siempre que sea posible y la situación del usuario lo permita, mientras que en el caso de los programas de salud infantil se priorizarán los menores de 15 meses vinculados a la vacunación.
La solicitud de emisión de renovación de recetas médicas (Plan de Tratamiento) se podrá gestionar a través de consulta telefónica, dejando a criterio del médico la necesidad de acudir o no al Centro de Salud, a través de un servicio que estará habilitado a partir de mañana, día 18 de marzo.
Así mismo, se adoptarán medidas para aumentar la distancia interpersonal tanto en las colas como en las zonas de espera, insistiendo además en que los pacientes acudan al centro no acompañados, salvo que por edad o situación clínica se requiera.
Quedarán suspendidas las siguientes actividades: espirometrías, retinografías, reuniones de los grupos de tabaco, grupos de lactancia, grupos de preparación al parto y cualquier actividad de tipo grupal, escolar o comunitaria, así como la formación intraequipo, salvo aquella imprescindible en relación a las medidas a tomar relacionadas con la pandemia de coronavirus, pero siempre priorizando la Intranet de cada centro.
Por otro lado se reorganizarán actividades como la extracción de muestras, manteniendo las urgentes y suspendiendo o posponiendo las demorables.
En lo que respecta a la Atención Hospitalaria se mantiene la actividad de consultas externas, siendo los profesionales los que valorarán aquellas en las que se puede evitar la asistencia física del paciente. Además, se priorizarán las primeras consultas de cada especialidad y las sucesivas preferentes o urgentes.
Por otro lado se mantendrán las citas en las agendas, y en aquellos casos que sea posible la ausencia del paciente el profesional sanitario contactará telefónicamente con ellos para evaluar su situación clínica y comunicar resultados de pruebas.
La actividad quirúrgica se limitará, en el caso de la programada, a la patología neoplásica y a aquella cuyo retraso pueda suponer un deterioro importante del estado de salud del paciente y al 100% de la cirugía urgente. Se mantienen los ingresos programados para procedimientos quirúrgicos o terapéuticos que no requieran, a priori, de ingreso en camas de críticos.
La Consejería de Sanidad recuerda que estas medidas son dinámicas y podrían modificarse en función de la evolución de la situación de pandemia por coronavirus COVID-19.