El Ayuntamiento de Arico está lidiando con una creciente problemática derivada de “vertidos incontrolados en diferentes puntos del municipio”. Según un informe técnico municipal reciente, la situación se ha agravado debido a la “ubicación” del complejo medioambiental en la localidad y la “negativa” de recoger este tipo de residuos en el complejo medioambiental, gestionado por el Cabildo de Tenerife, desde diciembre pasado.
Esta situación ha llevado a la “lamentable práctica de dejar estos residuos en puntos no autorizados del municipio, junto a contenedores municipales”. Algunos vecinos han informado que han visto camiones descargando estos residuos, aseguran los máximos representantes del municipio.
Por tal motivo, el gobierno en el municipio sureño ha tomado “medidas enérgicas”. Se ha tramitado y adjudicado un contrato por un importe de 16.048,93 euros a un gestor autorizado para la recogida de estos vertidos incontrolados.
La empresa adjudicataria comenzará a retirar y tratar los residuos esta semana. Además, el Ayuntamiento asegura que ha informado al Cabildo de Tenerife, tanto por escrito como en la Comisión de Seguimiento del complejo medioambiental, sobre la problemática.
En concreto, han solicitado la agilización de la construcción del punto limpio en el complejo y la colaboración del Cabildo en la resolución de este problema. Según el consistorio, sus informes técnicos indican que Arico se ve afectado al albergar el complejo medioambiental que recibe todos los residuos de la isla.
En ese sentido, la Consejera de Residuos ha manifestado su “compromiso para resolver este problema” y ya está en licitación el Punto Limpio que se ubicará en el Complejo Medioambiental.
Por otra parte, la Policía Local está llevando a cabo una investigación para detectar e investigar a posibles infractores. Además, han solicitado la colaboración de la Unidad de Protección Ambiental de la Policía Canaria para reforzar la vigilancia y prevenir los delitos de vertidos ilegales en puntos no autorizados.
El gobierno local asegura que se “han lanzado campañas de comunicación dirigidas a sensibilizar a la ciudadanía sobre la importancia de no depositar este tipo de residuos en lugares indebidos”. Y además, que han pedido la colaboración activa de los vecinos para detectar comportamientos incívicos e incluso delictivos que “ponen en peligro el medio ambiente y el bienestar de los vecinos”.