En el último pleno de la legislatura, el PSOE de San Miguel de Abona propuso dos medidas para mejorar la calidad de vida de los sanmigueleros: terminar la piscina municipal existente y cumplir el reglamento de participación ciudadana. El grupo de gobierno votó en contra de la primera y a favor de la segunda.

El candidato socialista a la alcaldía, José Carlos Rodríguez Rodríguez, defendió la necesidad de terminar la piscina municipal para ofrecer oportunidades de ocio, deporte, terapia y recreación a los vecinos y vecinas, especialmente a los mayores y a las personas con diversidad. Según él, “esto mejoraría la salud y calidad de vida”.

Rodríguez criticó el voto negativo del grupo de gobierno a la piscina del casco, que ya ha costado 800.000 euros a los sanmigueleros. Dijo que el grupo de gobierno” desconoce las necesidades reales del municipio” y que su argumento sobre la eficiencia energética “es falso”, ya que depende de la tecnología empleada y no de la ubicación geográfica. Añadió que es una pena que quieran dejar una infraestructura que ya existe y que podría beneficiar a la población.

Rodríguez defendió la terminación de la piscina de San Miguel de Abona, que lleva 20 años sin acabarse, como una forma de fomentar el urbanismo social, las actividades acuáticas, la dinamización del casco y la economía circular. El grupo de gobierno votó en contra de esta propuesta.

Correa defendió la moción sobre el fomento de la participación ciudadana, que permitiría a las personas involucrarse activamente en la toma de decisiones que afectan al interés general del municipio. La propuesta fue aprobada por unanimidad.

El PSOE de San Miguel de Abona ha presentado 34 propuestas en la legislatura (2019-2023), siendo el partido más activo. El 38,2% de sus propuestas han sido aprobadas por todos los grupos, el 7,3% han contado con el apoyo de la oposición y la abstención del gobierno y el 44,1% han sido rechazadas por Coalición Canaria.