Entre el 4 y el 12 de marzo, por las pantallas de MiradasDoc pasarán documentales que mostrarán el estado general del mundo en este último año.
El público de MiradasDoc tendrá una cita con la realidad a través de la mínima intermediación que ofrece el cine documental en la XV edición del festival de Guía de Isora. Con una programación que incluye treinta y ocho películas en las cuatro secciones a concurso, además de otras secciones temáticas que muy pronto se darán a conocer.
Relatos que abordan las migraciones, bien sea por cuestiones económicas, climáticas o por conflictos políticos; retratos de pequeñas historias que llegan desde lugares alejados de la vida urbana. Todos ellos componen la cuidada selección del festival que, un año más, convoca al encuentro con muchos de los directores y directoras de las películas a concurso.
Diez obras competirán en la sección de largometraje internacional: Apenas el sol, de Arami Ullón (Paraguay); La opción cero, de Marcel Beltrán (Cuba); Bosco, de Alicia Cano (Uruguay); Bukolika, de Karol Pałka (Polonia); Ostrov-Lost Island, de Svetlana Rodina y Laurent Loop (Suiza); Users, de Natalia Almada (México y USA); Brotherhood, de Francesco Montagner (República Checa e Italia); Lo que queda en el camino, de Jakob Krese y Danilo do Carmo (México, Brasil y Alemania); Kevin, de Joana Oliveira (Brasil); Zinder, de Aicha Macky (Niger).
En consonancia con el eje sur-sur que fija el rumbo de MiradasDoc desde sus inicios, destaca también este año el número de películas procedentes de África y Latinoamérica. Muchas de las cintas seleccionadas tendrán además su estreno nacional en las pantallas del festival tinerfeño.
Entre ellas podrán encontrarse las doce piezas de la sección de cortometraje internacional: Abisal, de Alejandro Alonso (Francia); Timkat, de Ico Costa (Portugal); Listen to the beat of our images, de Audrey y Maxime Jean-Baptiste (Guinea y Francia); A la recherche d’Aline, de Marieme Balde (Senegal); In flow of words, de Eliane Esther Bots (Holanda); Side by side, de Polen Ly (Camboya); Balcony concert, de Krzysztof Kadłubowski y Diana Kadłubowska (Polonia); Light years, de Monika Proba (Polonia); Don´t get too comfortable, de Shaima Al-Tamimi (Yemen y Kenia); Storgetnya, de Hovig Hagopian (Francia); Two spirits, de Mónica Taboada (Colombia); Love dad, de Diana Cam Van Nguyen (República Checa y Eslovaquia).
Abundan en la selección de este año puntos de vista desde la deconstrucción de la mirada colonialista, así como relatos que ahondan en la violencia de género o en los mandatos del patriarcado.
En el caso de la sección ópera prima, competirán seis documentales: The last shelter, de Ousmane Samassekou (Mali); Little palestine, diary of a siege, de Abdallah Al-Khatib (Líbano, Francia y Siria); Trenches, de Loup Bureau (Francia); Le choix de Fati, de Fatimah Dadzie (Ghana y Sudáfrica); Yoon, de Pedro Figueiredo Neto y Ricardo Falcão (Portugal); Nocaut, de Jose Varón (Colombia).
En la sección nacional habrá once películas, dos de ellas Canarias
Sedimentos, de Adrián Silvestre; Ancient Soul, de Álvaro Gurrea; Un cielo impasible, de David Varela; Room without a view, de Roser Corella; Bancal, de Rafael Montezuma; Versiones, de Claudia Torres; Dancing with Rosa, de Robert Muñoz Pérez; In ictu oculi, de Jorge Moneo; Mutha and the death of Ham-Ma Fuki, de Daniel Suberviola; A minor figure, de Jaime Weiss; Descartes, de Concha Barquero y Alejandro Alvarado
Aun tratándose de un año en el que la producción documental no ha sido tan elevada como en años anteriores, probablemente debido a la pandemia, el comité de selección ha tenido ante sí el reto de elegir entre las más de ochocientas películas presentadas a concurso. El resultado: una programación de gran calidad en el contenido y en la técnica y que ofrece todo un abanico de miradas que muestran con rotundidad lo que ocurre en distintos puntos del planeta.