Noticias Tenerife Vecinos de El Fraile piden se aclare los motivos del cierre del Comedor Social

Vecinos de El Fraile piden se aclare los motivos del cierre del Comedor Social

El Comedor Social “La Buena Estrella” de El Fraile, cerró sus puertas ayer martes 30 de Julio, tras venir realizando acciones y actos benéficos por cuenta propia, a falta de fondos gubernamentales, “para poder cubrir el servicio de comidas” a las cerca de 50 personas que de él se benefician.

Ya los responsables del comedor social, venían advirtiendo del posible cierre debido a los retrasos gubernamentales por el cambio de Gobierno, lo que suponía “no poder cubrir” los gastos de los servicios de alojamiento y comida del cual se benefician cerca de 50 personas en situación de vulnerabilidad social. Esta situación, les llevo a tratar de conseguir fondos por sus propios medios a través de acciones y galas benéficas como la Gran Arrozada, celebrada el pasado 21 de julio en el Centro Hípico Xanadú en Guargacho.

Tras el cierre, no han faltado opiniones de todo tipo por parte de los vecinos, en este sentido, algunos han manifestado que en ocasiones anteriores hubo quejas vecinales y de algunos usuarios, de la presencia de toxicómanos en el centro, así como la preocupación por parte de algunos, debido a que hace algún tiempo la Policía Nacional se presentó en el centro para presuntamente realizar una redada y marcharse con varios ordenadores.

A consecuencia del cierre de el comedor de El Fraile el día de ayer, la directora del centro realizó las siguientes declaraciones en el Diario de Avisos “Los problemas económicos, agravados por la retirada del Gobierno anterior de una subvención directa de 40.000 euros, acaban hoy con el único recurso en el Sur para los más desfavorecidos. Los problemas económicos han acabado con la agonía de unas instalaciones y un servicio que se han mantenido a duras penas en los últimos meses y que han dado de comer cada día, desde que abrió sus puertas, en noviembre de 2014, a medio centenar de personas sin medios económicos y en las que pernoctaban 25 usuarios que antes dormían en playas, cuevas y cajeros. “La burocracia y el sistema nos han ganado la batalla”.

Sea cual sea el motivo, personas y usuarios lamentan esta situación, ya que supone un duro golpe para los más vulnerables, y parte de ellos piden se aclare los verdaderos motivos por el cual se procedió a su cierre, esperando que hayan medidas paliativas para poder atender a las personas que necesitan este servicio y hoy se quedan sin él.

 

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