El pasado lunes, las instalaciones del Club Deportivo Marino se prepararon de forma especial para dar la bienvenida a un proyecto que busca ir más allá del terreno de juego. Se trata de “Estrella en la Calle”, una iniciativa parroquial que utiliza el fútbol como puente para impartir talleres socioemocionales a niños y niñas de 6 a 12 años que se encuentran en situación de vulnerabilidad.
El acto de presentación contó con la presencia de destacadas figuras, entre ellas, el obispo de Tenerife, Monseñor Eloy Alberto Santiago Santiago, quien bendijo el proyecto y tuvo el honor de realizar el saque inicial. Como recuerdo de su visita, el prelado recibió una camiseta personalizada del club, con su nombre y el dorsal número 10.

A la cita también asistieron el presidente del CD Marino, Francisco García Santamaría; el presidente del Rotary Club Tenerife Sur, Michael Bharwani; y el párroco de Nuestra Señora del Carmen de Los Cristianos, José Estévez Herrera. Todos ellos resaltaron el poder del deporte como una herramienta fundamental para la educación y la cohesión social.
El programa está diseñado para fortalecer una red de apoyo a las familias a través de actividades que desarrollan competencias clave en los más jóvenes. Cada sesión se divide en dos partes: una de entrenamiento de fútbol formativo y otra dedicada a dinámicas de grupo, coordinadas por psicólogas, donde se abordan temas como el trabajo en equipo, la comunicación asertiva, la resolución de conflictos y la empatía. Además, se incluyen módulos sobre el uso responsable de las nuevas tecnologías, una preocupación actual en la infancia.
“Estrella en la Calle” es posible gracias a una sólida colaboración entre el CD Marino, que aporta sus instalaciones y personal técnico; la Parroquia de Nuestra Señora del Carmen – Los Cristianos, que facilita el arraigo comunitario; el Rotary Club Tenerife Sur, que suma recursos y apoyo; y un equipo de psicología especializado. Actualmente, el proyecto ya atiende a unos treinta participantes y tiene previsto crecer para poder acoger a más niños y niñas.