Por: Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF).
CSIF denuncia que la presidenta del comité de empresa del ayuntamiento de tacoronte sea la única empleada municipal que tramita expedientes administrativos en su domicilio particular y que pretenda cobrar aparte de su sueldo íntegro una gratificación de más de 2500 €.
Esta empleada municipal con contrato laboral fijo que realiza tareas reservadas a funcionarios públicos como técnica de contratación administrativa y que además es la Presidenta del Comité de Empresa se lleva los expedientes administrativos a su casa y pretende encima cobrar gratificación por ello. Las razones que da para ello es que soporta un volumen de trabajo importante derivado de la transposición de las Directivas de la Unión Europea, de que pierde mucho tiempo hablando por teléfono y que es la única técnico encargada de tramitar expedientes de contratación. Y lo justifica como razones suficientes para que se le aprueben como trabajos extraordinarios fuera de su horario de trabajo, y no como horas extraordinarias presenciales, alegando razones familiares para ello.
Si no fuera porque hemos constatado la veracidad de tales afirmaciones, entenderíamos que se trata de una broma.
Por si esto fuera poco la empleada citada se cuantifica ella misma las horas que estima que necesita para realizar su trabajo, pretendiendo que en lo que va de año que se le retribuyan más de 200 horas extraordinarias a razón de unos 14 €/hora.
Y a mayor abundamiento, con absoluta impunidad y contraviniendo las más elementales reglas de discreción, confidencialidad, o ejemplaridad, sin aceptar ningún trato de favor o situación que implique privilegio o ventaja injustificada, máxime cuando ostenta la máxima responsabilidad representativa de los trabajadores (Presidenta de Comité de Empresa).
CSIF aboga por el teletrabajo reglado y en condiciones de igualdad para todos los empleados públicos del Ayuntamiento, sin trato de favor alguno; observando las debidas cautelas a la hora de tramitar expedientes que contengan datos personales protegidos, estando radicalmente en contra de que salgan de los dependencias municipales documentos con contenido sensible.
CSIF exige la dimisión de la presidenta del comité de empresa del personal laboral del ayuntamiento de Tacoronte por su falta de ejemplaridad en el ejercicio de sus tareas sindicales
Si el trato de favor o situación que implique privilegio o ventaja injustificada nos parece intolerable para cualquier empleado público, ni que decir tiene respecto de aquellos que ostentan cargos representativos de los trabajadores, a los cuales se les debe exigir un plus añadido de ejemplaridad. No pretendemos que sean un techado de virtudes, nos conformamos con que tengan un mínimo de honestidad y ejemplaridad con sus compañeros y representados.
Por ello CSIF exige la dimisión de la Presidenta del Comité de Empresa por la inobservancia de las más elementales condiciones de decoro, honestidad y ejemplaridad tanto en su condición de empleada pública como en el ejercicio de sus funciones representativas como miembro del Comité de Empresa.
Y lo razonamos porque en ningún caso debió aceptar ningún trato de favor, ni situación de privilegio o ventaja injustificada. No está de más recordar que es la única empleada municipal que se lleva los expedientes administrativos a su casa y cobra por ello. Es más, dimitiendo de su cargo tendrá más tiempo para realizar sus funciones con arreglo a los principios éticos y de conducta que se exigen a los empleados públicos, es decir, mantenimiento actualizado de su formación y cualificación; rechazo de favor
o servicio en condiciones ventajosas más allá de los usos habituales, sociales y de cortesía; cumplimiento de su jornada de trabajo; prestación que no incurra en una falta manifiesta de rendimiento, etc. etc.
CSIF lamenta que se pretenda engañar a los trabajadores de este ayuntamiento, pastoreándolos y tratándoles como menores de edad.
Por ello en los próximos días solicitaremos del Ayuntamiento que se nos informe desde cuando se viene produciendo tal trato de favor y el coste total que ha supuesto tal práctica.
Ahora empezamos a entender porque algunos están radicalmente en contra de que el Ayuntamiento acometa la aprobación de su Relación de Puestos de Trabajo, ya que con la aprobación de ese documento y la descripción detallada de las funciones de trabajo de sus empleados, sería imposible sostener situaciones tan insólitas como la descrita aquí.