El presidente de la Cámara de Comercio, Santiago Sesé, afirma que “hay que seguir promoviendo el crecimiento de la industria en el archipiélago para mejorar la diversificación de nuestra economía, seriamente lastrada por la crisis, y para mejorar los índices cuantitativos y cualitativos del empleo”.
El presidente de la Cámara de Comercio, Santiago Sesé, afirma que “hay que seguir promoviendo el crecimiento de la industria en el archipiélago para mejorar la diversificación de nuestra economía, seriamente lastrada por la crisis, y para mejorar los índices cuantitativos y cualitativos del empleo”.
La industria canaria continuó tirando del empleo durante el primer trimestre de 2018. De hecho, el promedio trimestral de afiliados a la Seguridad Social en el sector aumentó un 4,3% respecto al mismo período del pasado año, registrándose un total de 38.196 trabajadores a finales de marzo, 1.305 más que en el mismo mes del año 2017. Una mejora que también se aprecia en la evolución del número de desempleados inscritos en las oficinas de empleo público, cuyo promedio trimestral anual desciende un 7,7%, dejando la cifra en 8.635 parados registrados en marzo, 666 menos que en marzo de 2017.
Resultado positivo que aflora el último Boletín de Coyuntura trimestral del sector industrial elaborado por la Cámara de Comercio de Santa Cruz de Tenerife, del que también se extraen unos buenos resultados en relación con la actividad y la dinámica empresarial. Así, la estadística de Empresas Inscritas en la Seguridad Social indica que en Canarias existían en el mes de marzo un total de 2.963 empresas con trabajadores dados de alta en el Régimen General, lo que supone un aumento anual del 3,2% y 92 empresas más que en marzo de 2017 debido, principalmente, al crecimiento de las industrias manufactureras.
Para el presidente de la Cámara, Santiago Sesé, “esta es la línea de ascenso ha de seguir promoviéndose en el archipiélago con el objeto de contribuir a mejorar la diversificación de nuestra economía, seriamente lastrada por la crisis económica, y para mejorar los índices cuantitativos, pero sobre todo los cualitativos, del empleo en Canarias”. “Una industria que, además, se enfrenta a una auténtica revolución digital, con requerimientos de personal cada vez más de cualificado, con mayores índices de productividad y, por tanto, con mayores salarios”, matizó Sesé.
La caída de la producción de bienes de consumo, especialmente de los no duraderos, motiva el descenso del Índice de Producción Industrial.
A pesar de que la dinámica empresarial y del empleo mostraron una evolución positiva del sector, los datos relativos a la producción no fueron positivos debido a la caída de la caída de la producción de bienes de consumo, especialmente de los no duraderos que arrastró al conjunto del sector.
Una vez hecho el reajuste que supone el cambio de año base al 2015 realizado por el INE, el Archipiélago registra en el primer trimestre del año un descenso de la producción industrial del 1,6%, según muestra la variación de la media trimestral respecto al mismo período de 2017. Este descenso trimestral tiene su origen en la caída de la producción de bienes de consumo no duradero (-9,5%) y en los bienes de consumo duradero (-0,6%). Por el contrario, suben los bienes de equipo (7,6%), los bienes intermedios (0,8%) y la energía (0,5%).
Por otra parte, el Índice de Precios Industriales (IPRI) en Canarias mostró descensos durante el primer trimestre, con una tasa de variación interanual de la media trimestral del -1,1%, variación contraria a la nacional, que aumentó un 0,9%. Según el destino económico de los bienes la caída del índice general fue motivada por el descenso de la energía (-4,3%), que aún no había sentido el incremento y, en menor medida, por los bienes de equipo (-0,2%). Por el contrario, los bienes de consumo duradero registraron el mayor incremento (7,1%), seguidos de los bienes de consumo no duradero (2,4%) y los bienes intermedios (1,4%).