Un enorme protocolo de seguridad se activó este jueves, 19 de junio, en el Aeropuerto César Manrique de Lanzarote ante una presunta amenaza de bomba en el vuelo comercial BY6422 procedente del Reino Unido. La alerta, que resultó ser una falsa alarma, generó un amplio despliegue de efectivos y causó retrasos en la operativa aeroportuaria.
La incidencia se originó tras recibir un aviso por parte de la Torre de Control de AENA. Según informa el medio local Lancelot Digital, la tripulación de un avión de la compañía TUI, procedente de Cardiff (Gales), encontró una nota manuscrita en el lavabo de la aeronave en la que se alertaba de la existencia de un explosivo. Al parecer, se trataría de un pasajero galés quien presuntamente dejó la nota.
Tras el aterrizaje del avión, alrededor de las 10:55 de la mañana, se desplegó el considerable operativo de seguridad. En él intervinieron efectivos del Técnico Especialista en Desactivación de Artefactos Explosivos (TEDAX), de la Sección Fiscal y de Fronteras, de Seguridad Ciudadana y del Grupo de Investigación de la Guardia Civil, bomberos y patrullas de seguridad ciudadana. La aeronave fue desalojada y aislada en la pista como medida preventiva, mientras se restringían temporalmente algunas operaciones en el aeropuerto.
Después de una minuciosa inspección del aparato, el equipaje y todos los pasajeros, el resultado fue negativo, descartándose la existencia de cualquier artefacto explosivo a bordo. El Consorcio de Seguridad y Emergencias del Cabildo de Lanzarote confirmó que se trataba de una falsa alarma poco después del mediodía.
Según informaron los controladores aéreos, sobre las 13:15h se recuperó la normalidad en el aeropuerto de Lanzarote después del suceso. El avión se guió con la presencia de bomberos hasta un apartadero donde los pasajeros debieron identificar su equipaje. Las operaciones de aterrizaje y despegue se vieron interrumpidas temporalmente, lo que ocasionó algunas demoras.
Aunque la falsa alarma no afectó la operativa general del aeropuerto de manera crítica, sí provocó retrasos en la salida de al menos cuatro vuelos programados, generando interrupciones en la planificación habitual del concurrido aeropuerto lanzaroteño. Las autoridades continúan investigando, pues se trata de un grave episodio aunque solo de una nota se tratase.
Recuperamos la normalidad en el aeropuerto de #Lanzarote donde ha aterrizado un avión con aviso de bomba que ha resultado ser falso.
El avión se ha guiado con presencia de bomberos a un apartadero donde los pasajeros han debido identificar su equipaje.
Las operaciones de… pic.twitter.com/jrjF4ogrBL— Controladores Aéreos (@controladores) June 19, 2025
