Según María Luisa Castaño, directora de Energía del Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas (CIEMAT), deben implementarse iniciativas que unan las políticas de I+D+i con la industria y la economía, como principales valedores del cambio y la transición energética sostenible.
En el encuentro se presentó de forma oficial la Fundación Canaria Observatorio de las Energías Renovables y de la Eficiencia Energética que preside Paulino Rivero Baute.
La Asociación para el Progreso de la Dirección (APD) y la Fundación Canaria Observatorio de las Energías Renovables y la Eficiencia Energética, celebraron en la mañana de hoy martes un desayuno-coloquio sobre “Canarias, ante la transición energética”. La ponencia inicial estuvo a cargo de María Luisa Castaño, directora de energía del Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas (CIEMAT).
El Catedrático de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, Juan Ruiz Alzola, presentó y moderó el coloquio en el que María Luisa Castaño destacó en su ponencia inicial que en la Cumbre sobre Cambio Climático celebrada en París en el año 2015, en el que se establecieron las bases del Protocolo de Kyoto con el consenso de 195 países de todo el mundo que representaban el 95% de la emisión de CO2 de todo el planeta, se estableció un plan de actuaciones encaminadas al incremento hasta el año 2050 de políticas de disminución del consumo energético y de contaminación medioambiental a nivel mundial. El Objetivo 20/20 se comprometió a la reducción paulatina del CO2 y del incremento de la inversión en energías renovables.
Castaño planteó asimismo la apuesta de Canarias por establecer un período de transición energética hasta el año 2030, basado en la bajada de un 40% de la emisión de CO2, así como el incremento de entre un 27% al 35% de inversión en energías renovables, así como también resaltó como otros de los principales objetivos, la reducción de un 30% del consumo energético per cápita.
Este objetivo estableció tres vías principales de acción centradas en tres sectores básicos como la energía eólica de Canarias, lugar ideal para las energías off-shore flotantes, así como las energía fotovoltáica y la solar, pilares básicos en los que Canarias debe implementar iniciativas que unan las políticas de I+D+i más la influencia directa de los sectores económicos, los cuales deben convertirse – tal como dicen todos los expertos en la materia -, en demostradores del cambio energético, acompañado de una economía a nivel regional combinada con fondos europeos FEDER que impulsarían las tecnologías de grandes dimensiones. El CIEMAT está trabajando en ámbitos urbanos ya en esta materia.
En su opinión, el aprovechamiento creciente de los residuos, los cuales se pueden utilizar como biomasa sólida o líquida, o incluso gaseosa para convertirlos en elementos energéticamente aprovechables, se postula como otra de las posibles soluciones al impulso de la energía sostenible. Su tratamiento se puede inyectar en líneas de gas natural como uno de los múltiples ejemplos que ya se están implementando en otras comunidades autónomas. Existe actualmente un movimiento que avanza en el tratamiento y posterior uso de de grandes cantidades de residuos o, también llamados, residuos masivos.
La cultura de vehículos eléctricos fue otra de las ideas que lanzó M”ª Luisa Castaño en su disertación, comentando que este sector está experimentando un avance a marchas forzadas en el ámbito de la locomoción. Las prestaciones que se están ofreciendo en este tipo de vehículos haría necesario incorporar al sector turístico en un futuro cercano, el principal sector económico en las Islas Canarias, de puntos de recarga eléctrica por el territorio que faciliten el uso de estos vehículos, así como concienciar a la población en su uso. El fácil y asequible acceso a los híbridos debe ir calando en la sociedad, siempre con la colaboración entre sectores económicos, industriales, de investigación y políticos.
Castaño destacó que hay países que ya están desarrollando estos proyectos futuristas, como ejemplo de ello se encuentra Dinamarca, a través de la conquista del mar como fuente de energía con la implantación de sistemas de almacenamientos punteros, verdaderos hubs energéticos o islas energéticas que se conectan a una isla artificial donde se concentra la energía sobrante más fácilmente trasportable a otros lugares. Es típica de entornos aislados como puede ser el de Dinamarca o incluso Canarias, dada su situación geográfica aislada.
En su conclusión, Castaño resaltó la importancia de que la transición energética debe abordarse como una oportunidad de I+D, a nivel industrial, empresarial y política. Necesitaremos, en definitiva y según palabras de
Castaño, de un diseño inteligente, planificado y sensible de todo el sistema, que cuente con la implicación de todos los agentes relacionados. El entorno canario tiene recursos suficientes e inagotables – sol, viento y mar-, que necesitan de un apoyo público-privado encaminado a su desarrollo e implantación en los próximos años.
Trayectoria profesional Mª Luisa Castaño
Mª Luisa castaño tiene una larga experiencia en el ámbito de la innovación y la energía. Es licenciada en Ciencias Químicas por la Universidad de Valladolid. Ha desempeñado, entre otras responsabilidades, la Subdirección General de Colaboración Público-Privada, la Dirección General de Innovación y Competitividad, la Dirección General de Política de Investigación, Desarrollo e Innovación, todas ellas en el Gobierno de España, y, en la actualidad, la Dirección de Energía del CIEMAT.
El CIEMAT es un Organismo Público de Investigación adscrito al Ministerio de Economía, Industria y Competitividad a través de la Secretaría de Estado de Investigación, Desarrollo e Innovación focalizado principalmente en los ámbitos de la energía y el medio ambiente y los campos tecnológicos relacionados con ambos. Ocupa una posición intermedia en la cadena que va desde la creación de conocimiento básico a la aplicación industrial, de forma que su ámbito de actividad busca siempre servir de puente entre la I+D+i y los objetivos de interés social. En este sentido, se trabaja estrechamente con otros centros nacionales de I+D+i, instituciones, universidades y empresas del sector de nuestro país con el fin de transferir los conocimientos y la tecnología que se han generado, y con ello apoyar y ayudar al impulso de la innovación y al cambio del modelo económico basándose en el conocimiento. Cuanto con una plantilla de más de 1300 personas.