Las muñecas Nancy, los PinyPon, los coches slot o scalextric, los geiperman, son algunos ejemplos de juguetes que se han convertido en clásicos pues ahora cuestan, en perfecto estado, auténticas fortunas. Se han convertido los juguetes de nuestra infancia en objetos de coleccionismo que son muy difíciles de encontrar y que si los hayas deberás preparar el bolsillo.
Hablamos de juguetes que se lanzaron y eran tendencia en la época de los 70 y 80, que ahora más de treinta años después se revalorizan en mercados muy específicos. Hay a algunos que el coleccionismo de este tipo de juguetes les relaja como a Eugenia de Gijón, que tiene alrededor de 100 muñecas Nancy almacenadas en el estudio de su casa. Otros como Juan José Franch han hecho de su falta de juguetes en la infancia toda una profesión a sus 40 años de edad, “Como muchos de los niños de mi generación, siempre quise el barco pirata de Playmobil y, aunque los Reyes Magos siempre me trajeron piezas sueltas, nunca lo tuve de pequeño; así que de mayor me lo compré” y así nació una pasión de coleccionismo que compagina con su profesión y su familia.
Son miles las figuras distintas, algunas de edición limitada y rarezas que estas grandes marcas lanzaron al mercado y que hoy en día son muy disputadas. Pero no cualquiera se convierte en coleccionista, con los coches slot los famosos coches eléctricos que lanzó la popular marca scalextric se considera que no se colecciona sin una razón y unos gustos muy definidos. Tener criterio y poder adquisitivo para completar las colecciones son el motivo principal de esta pasión que limita espacio y presupuesto.
En el supuesto de los coches slots existen más aficionados que coleccionistas reales, por lo que se diferencian éstos últimos de que únicamente disfrutan de sus coches slots en circuito doméstico y probar sus características. De cualquier manera, tanto los aficionados como los coleccionistas disfrutan cada uno a su manera de estos juguetes clásicos de su infancia que mueve un hobby verdaderamente considerable en dimensiones internacionales y monetarias.
Los muñecos PinyPon por el contrario han evolucionado mucho desde la época de los 90, casi tanto como la Barbie. Aquellos pequeños juguetes apenas sin articulaciones con un montón de accesorios nos hacían la vida más pequeña y a la vez más accesible a pequeña escala. Hoy en día una colección completa de granja o jardín supera los 3000 euros mientras que el mismo paquete en versión 2018 con los juguetes de ahora ronda los 30 euros. Casi dan ganas de hacer una compra de este tipo de juguetes y tener un almacén por un periodo de otros 30 años para saber si se revalorizarán de igual forma o serán los videojuegos los grandes protagonistas entonces.
Lo que sí está claro es que las figuras de acción como el muñeco Geyperman que en la actualidad ya no se produce, ahora la encontramos en edición limitada para coleccionistas y nostálgicos. Con el mismo empaquetado y calidad ofrecen a este héroe de acción debidamente plastificado pero listo para una última aventura, eso sí tu bolsillo sufrirá las consecuencias, pero se convierten en perfectos regalos para los que de pequeños soñaban con sus geiperman.
Y hemos hablado de juguetes muy famosos en España, pero no nos olvidemos de aquellos coleccionistas que ahora también se apodan “frikis” cuyas colecciones estaban basadas en sagas como la de Star Wars y que hoy en día están muy revalorizadas e incluso con vistas a más películas y merchandising que no parece tener fin.