Algunos vecinos de Las Galletas del Municipio de Arona en el sur de Tenerife suplican al Ayuntamiento de forma urgente que intenten solucionar el problema de las ratas que cada día y noche circulan por las calles y están especialmente por la zona de los contenedores que han instalado en la entrada donde están las dos paradas de guaguas.
No estamos hablando de denuncias ni de política, estamos hablando de limpieza, el gran problema de todo el planeta y sumando el tema de los científicos gastronómicos que advierten que comer pescado enlatados es muy peligroso para la salud, porque son los principales culpables del cáncer de colon, debido a esos conservantes o colorantes que llevan dentro y cuando además alertan de que el pescado enlatado es perjudicial para la salud y a la misma vez las aguas fecales están llegando al mar cada segundo, muchos nos preguntamos qué será más peligroso, ¿Comer pescado enlatado o pescado fresco cogido en la misma orilla o comer pescado enlatado?”.
Y para seguir fomentando las ilusiones y subiendo la moral, los agricultores advierten a la sociedad a través de muchos medios de comunicación incluyendo éste, que los frutos y las hortalizas en poco tiempo podrán tener una subida de precios incalculables, porque las tierras están secándose ya que no cae ni una gota de lluvia.
Las depuradoras deberían ponerse en marcha urgentemente para convertir el agua salada en agua “potable” para el regadío y “agua potable” entre comillas, porque si los profesionales logran el milagro de convertir el agua salada en agua potable para el consumo humano, seríamos todos muy felices, aunque obviamente los empresarios que viven de éste mineral obligatorio para vivir los seres humanos, se cagarían en las madres que nos parió a todos.
Perdona que esta carta tenga mal rollo, pero advertir o aconsejar o informar de asuntos muy importantes es obligación de todas las personas responsables.
Aquí lo dejo para seguir reflexionando sobre las romerías de los pueblos y estimado lector, gracias por regalar un poco de tiempo leyendo, el tesoro más valioso del ser humano, el tiempo pasa y jamás volverá. Juan Santana.