El Cabildo de Tenerife instalará un sistema de semáforos inteligentes en la rotonda del Padre Anchieta y en otros cuatro enlaces de la autopista TF-5.
Así lo anunció el consejero insular de Movilidad y Carreteras, Dámaso Arteaga, quien detalló que todavía se están analizando cuáles serán los puntos exactos donde se aplicará esta medida.
La actuación se desarrollará en un tramo de siete kilómetros, comprendido entre Guamasa y El Sauzal, una de las zonas más problemáticas de la TF-5, por donde circulan diariamente más de 89.500 vehículos. La previsión es que los semáforos entren en funcionamiento entre octubre y noviembre.
“Estamos hablando de la implantación de un sistema basado en la tecnología de ‘Ramp Metering’ que permite regular de forma escalonada la entrada de vehículos a la autopista mediante semáforos inteligentes. De esta manera, se logra espaciar las incorporaciones y evitar colapsos en los carriles principales”, explica Arteaga.
El consejero Dámaso Arteaga presentó recientemente una iniciativa en Madrid durante una reunión con responsables de la Dirección General de Tráfico (DGT), quienes valoraron de manera muy positiva la propuesta.
Destacaron su carácter innovador y su potencial para mejorar tanto la seguridad como la fluidez del tráfico en la isla. En el encuentro, se acordó la creación de una comisión técnica conjunta entre ambas administraciones, con el fin de definir los aspectos técnicos y operativos del proyecto.
La presidenta del Cabildo, Rosa Dávila, resaltó que “esta es solo una de las más de 100 medidas que estamos impulsando para mejorar la movilidad en Tenerife, con un objetivo claro de descongestionar nuestras carreteras”.
“Debemos ser conscientes de que Tenerife tiene un altísimo nivel de motorización, estamos entre las diez regiones del mundo con más vehículos por habitante, y eso exige un cambio de cultura. Por eso estamos apostando por el transporte público gratuito, además de soluciones inteligentes como esta, que nos permitan avanzar hacia una isla más conectada, moderna y sostenible”, aclaró.
El propósito de los semáforos inteligentes es reducir las retenciones, mejorar la fluidez y aumentar la seguridad en una de las vías más transitadas de la isla, la TF-5, por la que circulan más de 124.000 vehículos cada día.
El ‘Ramp Metering’, una tecnología que ya se implementa con éxito en diversos países como Estados Unidos, Alemania, Japón, Australia y los Países Bajos, ha sido aplicada con resultados positivos en España, especialmente en la C-58 de Barcelona, una de las vías más congestionadas del país.
Además, ha sido probado en los accesos a la A-6 y la M-30 en la Comunidad de Madrid, como parte de estrategias de gestión dinámica del tráfico.
Dámaso Arteaga destacó que este sistema ha demostrado ser efectivo para reducir los tiempos de viaje hasta en un 20%, incrementar la velocidad media del tráfico en un 20% y disminuir los accidentes en torno a un 30%, al reducir los conflictos en los puntos de acceso. Asimismo, subrayó que también contribuye a reducir el consumo de combustible y las emisiones contaminantes.
Por otro lado, se ha acordado la creación de una comisión técnica conjunta entre el Cabildo y la DGT, encargada de definir todos los aspectos técnicos necesarios para garantizar la implementación de este sistema, que se ajustará a la normativa de tráfico vigente.
Lo más innovador de esta propuesta es que estará gestionada por inteligencia artificial. Gracias a la utilización de sensores, cámaras y modelos predictivos, el sistema podrá aprender del comportamiento del tráfico en tiempo real y ajustar el ritmo de entrada de vehículos según el volumen y la velocidad de circulación, especialmente durante las horas punta.