La Dirección General de Salud Pública del Servicio Canario de la Salud, dependiente de la Consejería de Sanidad, ha introducido modificaciones en la administración de la vacuna contra el virus del papiloma humano (VPH), ampliando la oferta vacunal con una pauta de una sola dosis para hombres y mujeres hasta los 18 años cumplidos.
Este cambio responde a las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y a una revisión exhaustiva del programa de vacunación contra el VPH realizada por el Ministerio de Sanidad, con el objetivo de aumentar la cobertura poblacional y simplificar los esquemas vacunales.
Pauta de Única Dosis entre los 12 y los 26 Años
Una de las principales conclusiones del Ministerio de Sanidad ha sido la adopción de la pauta de una dosis para niñas y niños de 12 años.
Además, se amplía la indicación de la pauta vacunal de dosis única a otros grupos de población menores de 26 años, como hombres que mantienen relaciones sexuales con hombres y personas en situación de prostitución.
Para el grupo de entre 26 y 45 años, se mantiene la recomendación de dos dosis para estos mismos colectivos.
Estas decisiones se basan en la creciente evidencia científica que avala la efectividad de la vacunación con una sola dosis y en el objetivo de reforzar la protección de la población.
Con este enfoque, también se recomienda la vacunación con una única dosis para los niños y niñas de 12 años, así como la captación de hombres y mujeres no vacunados frente al VPH hasta los 18 años incluidos.
Para el grupo de 12 a 18 años, ya que pertenece a la misma población diana, también se sugiere la vacunación contra el meningococo tetravalente (MenACWY) en aquellos casos en los que no se haya administrado ya dicha vacuna durante la adolescencia.
En el caso de los hombres, se incluye a aquellos nacidos después del 15 de diciembre de 2005 hasta que la cohorte nacida en 2011 cumpla los 18 años, siempre con pauta de una dosis.
Vacunación Personas de Riesgo
Se recomienda la vacunación contra el VPH para personas no vacunadas que presenten determinadas situaciones de riesgo, hasta los 45 años incluidos.
La pauta para estos casos es de una sola dosis hasta los 25 años, y de dos dosis espaciadas al menos seis meses a partir de los 26 años. Esta recomendación es especialmente relevante para hombres que tienen relaciones con hombres y personas en situación de prostitución.
Para personas menores de 45 años que no hayan sido vacunadas previamente contra el VPH y que se encuentren en situación de inmunodepresión, las indicaciones dependerán del criterio del médico hospitalario de referencia.
Se sugiere la vacunación en una pauta de tres dosis, sin importar la edad de inicio de la vacunación, para aquellos individuos pertenecientes a grupos de riesgo debido a condiciones como el síndrome WHIM; infección por VIH; trasplante de órgano sólido o de progenitores hematopoyéticos; enfermedad inflamatoria intestinal; tratamiento inmunosupresor o biológico que implique inmunosupresión grave (según la valoración del médico hospitalario de referencia); o papilomatosis respiratoria recurrente.
Además, se recomienda la vacunación en pauta de tres dosis para mujeres, sin límite superior de edad, que hayan recibido cualquier tratamiento escisional por lesión intraepitelial de alto grado en el cérvix (CIN2+) o superior, así como para hombres que tienen sexo con hombres (HSH) con displasia anal por VPH.
Se recomienda realizar la vacunación preferentemente antes del tratamiento de la lesión o, si no es posible, lo antes posible después de finalizar el tratamiento.
Vacunación como Prevención
La infección por el virus del papiloma humano (VPH) es una enfermedad viral que puede provocar lesiones en la piel o en las mucosas, como verrugas.
Existen más de cien variantes de este virus, y aunque la mayoría de las infecciones no conducen a cáncer, algunas cepas pueden generar diferentes tipos de tumores.
En particular, ciertos tipos del VPH genital están asociados con el cáncer de cuello uterino, así como con otros tipos menos comunes, como el cáncer de ano, pene, vagina, vulva y la parte posterior de la garganta (orofaringe).
La vacunación ofrece protección contra las cepas de este virus que tienen mayor riesgo de causar estos tipos de cáncer.