“No somos de segunda categoría por residir en el sur de la isla. Todos los tinerfeños y tinerfeñas somos de primera”, declara Vanesa Díaz Hernández, una residente del núcleo de Cabo Blanco, en el sur de Tenerife. Hace menos de un año, su padre fue diagnosticado con una enfermedad terminal, y la familia se enfrentó a numerosos obstáculos durante su evolución y desenlace.

Vanesa relata cómo la ubicación geográfica de su hogar, situado en el municipio de Arona –núcleo donde se encuentra el Hospital del Sur–, limitó el acceso a la atención domiciliaria proporcionada por la unidad de cuidados paliativos. “El hecho de tener que desplazar a la persona enferma de un extremo a otro de la isla o, desde otra isla hasta el ‘Hospital del Tórax’, va en contra de cualquier derecho humano, va en contra de cualquier atisbo de humanidad”, expresa.

La familia Díaz tuvo que realizar numerosos traslados desde Cabo Blanco al Hospital de Ofra en Santa Cruz, que eran agotadores y dolorosos, tanto física como emocionalmente para su padre. “Al sufrimiento de la enfermedad se suma el sufrimiento por una mala gestión de la sanidad pública que pagamos todos y todas”, añade Vanesa.

El sur de Tenerife es conocido como la locomotora del crecimiento económico y poblacional de la isla, pero para ella, la inversión pública en servicios para la ciudadanía deja mucho que desear. “Se habla mucho de grandes infraestructuras como el conocido Tren del Sur y el Puerto de Fonsalía, así como de proyectos privados como el del Puertito de Armeñime, pero no recibe atención algo tan básico como la culminación efectiva del Hospital del Sur”, critica Vanesa.

Ella, quien sufrió la pérdida de su padre hace tres meses, ha iniciado este movimiento con el objetivo de que otras familias no tengan que pasar por lo mismo. Por ello, se ha embarcado en una campaña que busca presionar a los organismos para mejorar el acceso a los cuidados paliativos en el sur de Tenerife.

Ha lanzado una petición en change.org, ha establecido colaboraciones con entidades regionales y nacionales, y ha presentado una reclamación formal al Servicio Canario de Salud. Además, la plataforma está trabajando para hacer cumplir los compromisos establecidos por la entidad en la Estrategia de Cuidados Paliativos de Canarias 2018-2023.

“Ayúdame a conseguir que las personas del sur de Tenerife que tengan que tratarse en cuidados paliativos lo puedan hacer lo más cerca de sus casa o en sus casas”, pide Vanesa.