El Ayuntamiento de Arona y la Asociación de Personas LGTBIQA+ del Sur de Tenerife, Canary-Pride, se unieron para marcar el Día Mundial de la Lucha contra el SIDA. El evento, que tuvo lugar en la puerta principal del consistorio y la Plaza del Cristo de la Salud, fue un poderoso recordatorio de la lucha continua contra esta enfermedad.
José Dailos Luis, líder de Canary-Pride, expresó su gratitud por la inclusión del Ayuntamiento en este importante evento. “Este acto de solidaridad”, dijo, “demuestra la disposición de la nueva corporación para enfrentar el desafío del VIH/SIDA”.
Felipe Villamil, un activista vih-visible, aprovechó la oportunidad para aclarar algunos conceptos erróneos comunes sobre el VIH y el SIDA. Explicó que el VIH, cuando se diagnostica y se trata a tiempo, no tiene por qué convertirse en SIDA. Con el tratamiento adecuado, el VIH puede ser indetectable e intrasmisible, permitiendo a las personas afectadas llevar una vida plena y de calidad.
La alcaldesa de Arona, Fátima Lemes, reafirmó el compromiso del Ayuntamiento con la lucha contra el VIH. Manifestó que el Ayuntamiento se alinea con los organismos internacionales y nacionales en su esfuerzo por sensibilizar a la sociedad sobre el impacto del VIH en la vida de las personas. Su objetivo, dijo, “es poner fin al estigma y la discriminación y mejorar la calidad de vida de las personas que viven con el VIH”.
Fátima Lemes citó las palabras de António Guterres, secretario General de Naciones Unidas, quien afirmó recientemente que “el sida puede ser derrotado”. El evento concluyó con un emotivo aplauso y una foto grupal con el lazo rojo, un símbolo de la lucha contra el SIDA, desplegado en el exterior del Ayuntamiento.
