En un destacado avance para la preservación de la biodiversidad, Loro Parque Fundación ha celebrado recientemente un importante logro: el nacimiento de tres nuevos pichones de guacamayo de Lear en su hábitat natural en la Caatinga brasileña.
Estos pichones son hijos de una pareja criada en Loro Parque como parte del programa de recuperación de esta especie, que fue considerada funcionalmente extinta en 1992.
Este éxito resalta la relevancia de los programas de recuperación de especies desarrollados en parques zoológicos, subrayando la capacidad de reintroducción de animales criados en cautiverio al entorno silvestre.
La historia de éxito ratifica el papel fundamental de los parques zoológicos en la conservación de la fauna y la flora, demostrando que los animales criados en estas instalaciones pueden ser devueltos exitosamente a su entorno natural.
El caso es aún más notable al observar que esta pareja de guacamayos de Lear ha logrado criar tres pichones en la misma nidada, un fenómeno que solo se presenta en el 3% de las parejas silvestres. Este hito es el resultado de un enfoque integral que involucra la enseñanza de habilidades de supervivencia a los animales antes de su reintroducción.
Historia de los guacamayos de Lear criados en Loro Parque
Un esfuerzo continuado de una década para rescatar una especie al borde de la extinción Ante la grave amenaza que enfrentaba el guacamayo de Lear, en 2006 el Gobierno de Brasil envió a Tenerife una pareja de esta especie con el propósito de establecer una población de cría que eventualmente pudiera ser reintroducida en su hábitat original.
En un asombroso lapso de solo seis meses después de su llegada a la estación de cría en Loro Parque Fundación, los primeros pichones nacieron. Desde entonces, han nacido más de 40 pichones de esta especie en Loro Parque Fundación.
En 2019, ocho guacamayos de Lear nacidos en Loro Parque Fundación fueron reintroducidos en la Caatinga. Entre estos individuos, una pareja se formó de manera natural y, a fines del año pasado, lograron su primer pichón de Lear.
En un espectacular desarrollo, esta pareja ha logrado criar tres pichones en su segunda nidada, consolidando firmemente el éxito del trabajo continuado a lo largo de más de diez años. Loro Parque ha colaborado estrechamente con el Gobierno de Brasil y otras instituciones locales en este empeño.
La pareja de guacamayos que ha tenido éxito en la reproducción nació en Loro Parque Fundación como parte de un programa de cría diseñado para abordar la crítica situación de la especie en 1990, cuando solo se contabilizaban 22 ejemplares en la Caatinga, al borde de la extinción funcional. Esta especie habita un bioma exclusivo del noreste de Brasil, donde la caza furtiva y la deforestación para la expansión de áreas de cultivo contribuyeron significativamente a su declive.
Garantizar la supervivencia de la especie ha requerido un esfuerzo directo en el terreno para combatir la caza furtiva y compensar a los agricultores por los daños causados a sus cultivos por estas aves. Loro Parque Fundación colaboró en la implementación de un programa en asociación con otras organizaciones, el cual involucró análisis detallados, georreferenciación y cuantificación de las áreas afectadas de cultivo de maíz, permitiendo una respuesta precisa y eficaz.
