El festival Buenavista Diversa concluye su octava edición, un evento donde la inclusión y la diversidad cultural han sido los protagonistas en cada momento.
Celebrado en Buenavista del Norte del 13 al 16 de junio, el festival hizo un llamado a la igualdad a través de su emblemático Tetris de la Diversidad, presentado en varios escenarios alrededor de la Plaza de Los Remedios.
Miles de visitantes se dieron cita en Isla Baja para disfrutar de una amplia gama de actividades que incluyeron conciertos, talleres, obras de teatro y mucho más.
Después de cuatro días de intensa actividad, la alcaldesa Eva García expresó: “ha sido un orgullo, un año más, ser protagonistas en la fiesta de la Diversidad”. García destacó que un municipio pequeño como Buenavista del Norte pueda organizar y llevar a cabo un evento de esta magnitud, lo cual “es una muestra del gran compromiso que hay en este pueblo con todas las personas, independientemente de su condición”.
Aseguró que, después de ocho ediciones, “en lo que al equipo de gobierno actual respecta, Buenavista Diversa tiene vida para muchos años más”.
La inauguración del festival el pasado 13 de junio contó con la presencia del reconocido escritor y cineasta español Albert Espinosa, elevando las expectativas del evento.
Los alrededores de la Plaza de la Convivencia (Plaza de Los Remedios) se llenaron de una variedad de actividades multidisciplinarias diseñadas para todos los públicos.
Entre las actividades más destacadas se encontraban la VI Carrera Popular Solidaria, organizada por el Centro Ocupacional Comarcal Isla Baja, y el concierto Integrados, a cargo de Click and Roll, con la participación de artistas como Mel Ömana, Renzzo El Selector y Jadel, ganador de la primera edición del popular programa de televisión ‘El Número Uno’.
El espectáculo comenzó con una actuación impresionante del colectivo local Dibatuka Orquesta, compuesto por miembros del Centro Ocupacional, que interpretaron varios temas, poniendo de manifiesto el talento musical existente en el municipio.
Durante el concierto, los asistentes tuvieron la oportunidad de experimentar con las mochilas sensitivas, una innovación de la organización Rumbo Ziday que permite a las personas sordas sentir la música a través de vibraciones sincronizadas con la música en vivo.
Además, el festival contó con la participación de profesionales de la Lengua de Signos Española.
La alcaldesa destacó que “desarrollar este tipo de propuestas y lograr que Buenavista sea el escenario donde se den a conocer sitúa al municipio en la cúspide de la innovación por la inclusión”.
También agradeció a todos los colectivos que participaron en el festival y “que lo han hecho posible con su gran trabajo desinteresado”, resaltando especialmente la implicación de los estudiantes del Programa de Formación en Alternancia con el Empleo (PFAE) Tagoror.
La octava edición de Buenavista Diversa ha sido histórica tanto por la gran afluencia de público como por la relevancia de sus actividades. Con la satisfacción de haber alcanzado la máxima puntuación, el festival guarda sus piezas del Tetris y cierra la partida.
Con la vista puesta en 2025, la organización tiene el firme propósito de seguir añadiendo iniciativas que refuercen el compromiso del municipio norteño con la inclusión al más alto nivel.
