El Círculo de Empresarios y Profesionales del Sur de Tenerife (CEST) alerta de los colapsos vividos en torno al aeropuerto Tenerife Sur en estas fechas navideñas y exige a AENA que se responsabilice de dar soluciones inmediatas para garantizar unos servicios adecuados al alto tráfico de pasajeros. Desde la asociación alertan que la discutible gestión de la movilidad de las personas en este “aeropuerto deficiente” no solo genera problemas en el propio recinto, creando una mala imagen del destino, sino que ya afecta a la movilidad de toda la comarca, como es el caso de su principal arteria, la TF-1.

El presidente del CEST, Javier Cabrera, explica que “ha habido días en los que se han superado las 100 llegadas de vuelos, con una media de 220 pasajeros por avión, lo que se traduciría en más de 22.000 pasajeros que deben abandonar el aeropuerto a los que hay que añadir los acceden para salir de la isla y ese volumen de personas necesita una atención eficaz y eficiente”. En este sentido, asegura que AENA no está trabajando para los tinerfeños ni para la industria turística.

“Se viven situaciones muy tensas, dada la desesperación de los visitantes de abandonar el recinto, ya que las guaguas privadas terminan saliendo con dos horas y media de retraso y se dan colas de más de una hora y media para acceder a diferentes sistemas de transporte”, añade Cabrera, que pone el foco en “unos servicios aeroportuarios que no están a la altura de la calidad de nuestro destino ni de la cantidad de pasajeros internacionales recibidos, estropeando la experiencia del turista desde los primeros instantes de su estancia en la isla”.

Asimismo, el presidente del Círculo de Empresarios advierte que “los problemas de colapso se extienden a las principales carreteras de la zona sur de la isla, haciendo que, en determinadas horas del día, se haga imposible acceder a ciertos núcleos turísticos”. Por este motivo, considera que la búsqueda de soluciones tiene que ser un proceso conjunto, que se extienda más allá del recinto aeroportuario.

Por otro lado, desde el CEST reivindican una revisión de los precios de algunos de los servicios ofrecidos por el aeropuerto, como es el caso del parking, de forma que pueda democratizarse su uso. También instan a AENA a establecer algún tipo de control respecto a la oferta de restauración, de manera que ajusten sus precios a la calidad de las propuestas que ofrecen. “Es realmente desproporcionado lo que cobran por productos cuya calidad está muy por debajo de lo esperado”, añade.

Javier Cabrera agradece la implicación del Gobierno de Canarias, en concreto a través del viceconsejero de Infraestructuras, Francisco González, “que no solo defiende las necesidades de la isla respecto al aeropuerto y las carreteras, sino que ha trasladado a AENA alguna de las grandes demandas del CEST”. “Sin embargo, vemos con mucha preocupación cómo los responsables de la empresa niegan prácticamente la totalidad de los problemas detectados por los agentes locales alrededor del recinto aeroportuario”, admite.

“No podemos permitir que los turistas y los propios residentes en Tenerife tengan que seguir soportando colas interminables en un hall de llegadas totalmente saturados”, recalca, subrayando “la incomodidad, mala imagen y los inconvenientes por retrasos a los que se ven expuestos los usuarios”. Por todo esto, cree que es “absolutamente urgente y prioritario poner soluciones sobre la mesa que drenen, de una vez por todas, esta situación de forma rápida”.