El Ayuntamiento de San Miguel de Abona aprobó en su última sesión plenaria poner a disposición del Cabildo Insular el suelo urbano de dominio público necesario para la ejecución del proyecto de “Mejora de las intersecciones de la carretera insular TF-65 con el polígono industrial de Las Chafiras”.
Algo que explicaba recientemente el alcalde del municipio, Arturo González, quien entiende que “es ahora cuando corresponde al Cabildo conseguir los terrenos rústicos o urbanizables, licitar y ejecutar estas obras que mejorarían la movilidad del tráfico de la zona y el acceso a Costa San Miguel”.
González ha querido remarcar que “por este lugar circulan una media de 50.000 vehículos diarios, por lo que sería necesario que esta obra estuviese ejecutada antes del inicio de las obras del tercer carril de la TF-1 Enlace Oroteanda-Las Chafiras en el tramo dela actual rotonda de Las Chafiras, la cual se prevé comenzar una vez culmine el enlace de Oroteanda que actualmente se está ejecutando”.
El alcalde de San Miguel de Abona manifiesta que “se está hablando de una zona a la que se puede considerar como “punto negro”, puesto que se suelen producir numerosos accidentes de tráfico”. Por ello, con la ejecución de estas obras “se conseguiría la seguridad de la circulación mediante la modificación de las intersecciones existentes”.
Por otro lado, se persigue, entre otras actuaciones, el acondicionamiento de la carretera mediante la corrección del trazado geométrico, la rehabilitación del firme en mal estado, la revisión de los elementos de sección transversal, señalización, balizamiento y defensas, drenaje y jardinería.