Las obras, que finalizarán en el plazo previsto, atenderán las necesidades de los próximos tres años. La actuación consiste en la construcción de 80 nuevos nichos.
Los trabajos de ampliación y mejora del cementerio del San Miguel de Abona, donde destaca la construcción de 80 nuevos nichos, están a punto de concluir, con una inversión superior a los 46.800 euros.
“Con dichas obras, que se están desarrollando en tiempo y forma, contamos con el espacio para atender las necesidades de los próximos tres años”, ponen de relieve tanto el alcalde, Arturo González, como los concejales de Obras y Servicios Generales, Víctor Chinea y Julián Martín, respectivamente.
Los regidores municipales ponen de manifiesto que ya está aprobado el reglamento de funcionamiento que permite el uso de los 120 osarios construidos en el camposanto sanmiguelero.
Asimismo, el Ayuntamiento ha redactado los proyectos para adaptar las criptas a la nueva ley mortuoria, comenzando por la del casco urbano para continuar con las cinco restantes que hay distribuidas en el conjunto de dicho municipio sureño.
