El alcalde de Guía de Isora, Pedro Martín, ha expresado su enfado con el Servicio de Inspección de Carreteras (SIC) del Cabildo de Tenerife tras el incidente provocado la semana pasada por el desprendimiento de un talud en la calzada de la TF-1 a la altura de la salida de Chío.          

El tráfico que circulaba por el tramo de autopista que conecta Guía de Isora con Santiago del Teide se vio interrumpido durante varios minutos tras la caída de cascotes provenientes de un talud anexo. Además, 6 vehículos se vieron obligados a cambiar las ruedas debido a desperfectos ocasionados por las piedras en la calzada.

Para Pedro Martín, alcalde del municipio afectado, se trata de una situación “lamentable” provocada por la ausencia de un servicio eficaz de matenimento y limpieza en las autopistas de Tenerife. Martín ha exigido al Cabildo que “asuma sus competencias y no olvide, de nuevo, un tramo fundamental para la isla de Tenerife”.

Fueron los propios conductores de los vehículos quienes, ante la tardanza de más de dos horas del Servicio de Inspección de Carreteras del Cabildo de Tenerife, retiraron con sus propias manos las piedras de mayor tamaño para permitir el paso. Esta no es una situación nueva para los vecinos de la comarca suroeste de Tenerife.

En el verano de 2017 y en febrero de 2018 el Ayuntamiento de Guía de Isora tuvo que intervenir de emergencia en el ramal de Fonsalía ante el abandono de un coche quemado y los restos de un accidente, respectivamente. Con anterioridad el consistorio ha recibido numerosas quejas por la acumulación en los arcenes de animales muertos, bidones de plástico y restos de basura.