Tras años de búsqueda de fondos y diversos contratiempos, comienza el plazo de 18 meses previsto para la construcción del nuevo templo. El acto contó con la presencia del obispo, Bernardo Álvarez; el alcalde de Guía de Isora, Pedro Martín; el alcalde de Santiago del Teide, Emilio Navarro y los consejeros del Cabildo, Jesús Morales y Josefa Mesa.

Desde la clausura del templo de Nuestra Señora de Candelaria en 2006 por motivos de seguridad, los feligreses de Alcalá deseaban la construcción de un nuevo templo que cumpliese con las necesidades religiosas de la comunidad. La semana pasada ese anhelo puso la primera piedra.

Para el alcalde Pedro Martín “es un acto importante porque el trabajo de años de la comisión parroquial ve por fin el arranque de las obras. Será un lugar de culto pero también un lugar de encuentro para los vecinos y vecinas de Alcalá”. El mandatario municipal destacó el apoyo del consistorio con la comunidad cristiana tras ceder en 2011 la capilla del velatorio local para el culto y resguardo de la Virgen de la Candelaria. “Fue una solución digna para cubrir una necesidad momentánea, pero todos deseábamos ver llegar este día”.

El evento contó con la tradicional puesta de la primera piedra, bendecida para la ocasión por el obispo Bernardo Álvarez. Además, se enterró junto a la piedra una cápsula de tiempo para la posteridad que incluía monedas de curso legal (quien sabe si lo seguirán siendo cuando se desentierren en el futuro), los periódicos del día y las actas de constitución de la nueva parroquia.

La nueva iglesia proyectada admitirá un aforo aproximado de 300 personas sentadas. Como espacios complementarios al templo, en consonancia con la función pastoral de la parroquia, se proveerán espacios multifuncionales que puedan albergar diversas actividades (catequesis, reuniones, conferencias, etc). La inversión total es de 1.473.563€, de los cuales el obispado financia casi 1 millón de euros. Gobierno de Canarias y Ayuntamiento aportarán 400.000 y 75.000 € respectivamente.