Granadilla de Abona abrió un portal en el tiempo para vivir por un día la vida a principios del siglo veinte, para ello, utilizaron divertidos juegos y estudios costumbristas canarios para estimar y fomentar las tradiciones entre los más jóvenes.

Ése fue uno de los objetivos de la campaña ‘Granadilla de Abona, cuna de tradiciones’, coordinada por la Concejalía de Patrimonio Histórico,, que se celebró en varios puntos del casco histórico del municipio, y que tuvo que ser aplazada a primera hora de la tarde debido a los aguaceros.

El responsable del Ayuntamiento, José Domingo Regalado, y el concejal de Patrimonio Histórico, Fredi Oramas, invitaron a todos los participantes a disfrutar de las distintas actividades que se dieron durante la actividad cultural, como por ejemplo, la presentación visual ‘Oficios en el recuerdo’ del agregado Fotos de Antaño de Granadilla de Abona en el Claustro Franciscano.

Así como también los habituales juegos para los más pequeños, en la calle Arquitecto Marrero, unidos a una muestra de juguetes antiguos. La cata de vinos de la localidad de Abona, con dirección de la enóloga Maeva Tendero, en la que pudieron degustar unos caldos de la comarca acompañados de la melodía de Dulce Barrios, el timple de Alba Chávez y la guitarra de Jonay Marrero.

Las actividades aplazadas, están previstas para el 14 de enero, son los talleres formativos de iniciación a la roseta y a la alfarería tradicional; la ruta musical y teatral a cargo de la Agrupación Folclórica Oroval, y la actividad ‘Vamos pal baile’.