Los controles de velocidad en las calles y avenidas del municipio suponen 135 denuncias solo en los primeros seis días.
La iniciativa ha apostado por la prevención, con una campaña de información y el anuncio previo de las ubicaciones para cada jornada.
La Policía Local de Arona, en colaboración con la Dirección General de Tráfico (DGT), ha organizado una campaña especial de vigilancia y control de la velocidad del tráfico en las principales vías de titularidad municipal mediante un vehículo con radar, cedido por la DGT, que se ha instalado en una veintena de calles y avenidas desde el 23 de noviembre y hasta el 2 de diciembre. En este periodo, los agentes municipales han detectado a vehículos que doblaban la velocidad máxima permitida en algunas vías urbanas, caso de la avenida Chayofita (que circula junto a centros escolares y deportivos), y ha presentado 135 denuncias solo en los primeros seis días de la campaña, que suponen el 6,4% del total de vehículos que circularon en esas fechas y vías.
El radar, operado por agentes de la Policía Local que han sido habilitados y formados con este fin, ha prestado servicio en turnos que cubren todo el horario y en aquellos ámbitos del municipio en los que existe un especial interés en establecer estas vigilancias, como son las zonas escolares, las vías de titularidad municipal con mayor número de accidentes o en las que existe un mayor riesgo constatado para peatones y otros usuarios de la vía.
Este sistema de control se ha diseñado para ejercer una labor de prevención en las zonas en las que se ha constatado un índice alto de vehículos que no respetan el límite de velocidad establecido y que, además de un significativo volumen de accidentes, generan un peligro potencial sobre el resto de usuarios de la vía. De hecho, está constatado que un atropello a una velocidad de 50-60 km/h es mortal, así como que la utilización de cinemómetros en los “puntos negros”, disminuye considerablemente la cifra de accidentes en los que el exceso de velocidad es el elemento predominante.
Por ello, se ha apostado por la transparencia, con una campaña de información previa y el anuncio, a través de publicaciones en las redes sociales municipales, de todas las vías en las que se ubicaría el radar cada jornada. Además, el vehículo con el cinemómetro, convenientemente rotulado, se ha ubicado en zonas visibles. Sin embargo, solo del 23 al 29 de noviembre, 135 vehículos superaron la velocidad máxima permitida en las zonas del control, incluso, algunos a más del doble.
Esta acción se integra en acuerdo de colaboración del municipio con la DGT y que incluye el intercambio de información para una mayor operatividad conjunta, con proyectos como el programa Arena, mediante el que se transfiere a Tráfico los datos de accidentalidad con heridos de todas las consideraciones, así como los atestados que se llevan a cabo en Arona.
La Ley de Seguridad Vial y el Reglamento General de Circulación fijan la normativa aplicable a los límites genéricos y específicos de velocidad, velocidad en adelantamiento y distancias entre vehículos. El incumplimiento de estas normas está tipificado como infracción grave o muy grave, con multas de 100 a 600 euros. Y el Código Penal establece pena de prisión por conducir a velocidad superior en 60 kilómetros por hora en vía urbana o en 80 kilómetros por hora en vía interurbana a la permitida.