Las charlas y conferencias contaron con una participación de 750 personas, mientras que al concierto que cerró las jornadas asistieron más de 5.000. Los asistentes otorgan una nota de 4,7 sobre 5 a los “networking brunches” y de 4,5 a las “beach conferences”.
La auditoría realizada por la empresa de consultoría Deloitte para medir la repercusión del evento revela que el festival contribuyó con dos millones de euros al PIB canario, permitió mantener 61 empleos, generó unos ingresos a las Administraciones Públicas de 150.000 euros y un impacto publicitario con una rentabilidad del 150%.
Según un informe de auditoría encargado a la empresa de consultoría Deloitte, revela que el evento generó una actividad económica por valor de 1,66 millones de euros. De esa cantidad, el 97% se quedó en empresas locales, de Tenerife.
El ARN Culture & Business Pride, que este año celebró su primera edición en Playa de las Américas entre el 5 y el 11 de julio, es un festival que busca resaltar el valor de las aportaciones de la comunidad LGTBIQ al conjunto de la sociedad, poniendo el acento en la ciencia, la empresa, la cultura, el activismo o el arte sin olvidar el aspecto lúdico.
La oferta cultural y de tuvo un importante poder de convocatoria, ya que durante la semana durante la que se desarrolló participaron más de 700 personas en las charlas y conferencias que se celebraron, alcanzando su punto álgido durante el concierto protagonizado por Morcheeba y Marc Almond, que puso el broche de oro al evento y que sumó a más de 5000 asistentes a lo largo de la jornada. Todas ellas otorgaron una nota media positiva a cada uno de los hitos del festival.
Sobre un total de cinco puntos, los “networking brunches” fueron los mejor valorados, con una nota de 4,7, seguidos de las “beach conferences”, con un 4,5; la entrega de los premios Alan Turing, con un 4,3; el ARN Music Festival, con un 4,2 y el ARN Leisure, con un 4,1.
En cuanto a su impacto económico, y además del gasto generado, la auditoría de Deloitte revela que la contribución del festival a la economía de Canarias fue de dos millones de euros en términos de Producto Interior Bruto (PIB), logrando el mantenimiento de 61 empleos y unos ingresos fiscales a las arcas públicas de las diferentes Administraciones Públicas de 150.000 euros.