El Ayuntamiento de Arico ha aprobado en comisión informativa su Plan Económico-Financiero (PEF), una medida que el gobierno municipal (PSOE-PP) defiende como garantía de “estabilidad de las cuentas públicas” y clave para “seguir mejorando la calidad de vida de los vecinos”. Esta aprobación se produce después de que Coalición Canaria (CC) denunciara una “grave situación económica” que llevó al consistorio a incumplir la regla de gasto.
Según el gobierno municipal, liderado por la alcaldesa Olivia Delgado (PSOE), el PEF “no se trata de un plan de recortes, sino de responsabilidad”. Afirman que el incumplimiento de la regla de gasto en un 11,28% en 2024 se debió a la necesidad de “pagar deudas heredadas del mandato anterior y mejorar servicios públicos que estaban bajo mínimos”, y no a que se haya gastado más de lo que el Ayuntamiento tiene.
El ejecutivo local destaca que en “apenas dos años” se ha “transformado la parálisis heredada en acción real”, con un aumento de más del 100% en inversiones, reasfaltado, obras en polideportivos, la ampliación de servicios como la acogida temprana y un crecimiento del 187,55% en la red de subvenciones para varios colectivos.
El plan, aseguran, permitirá aumentar las inversiones reales y seguir ampliando servicios, proyectando para 2025 y 2026 el cumplimiento de las reglas fiscales, la ausencia de deuda pública y el pago a proveedores en menos de 30 días. La alcaldesa, Olivia Delgado (PSOE), señaló: “No hemos venido a poner excusas, sino soluciones”. Por su parte, el primer teniente de alcalde, Andrés Martínez (PP), añadió que, a pesar de asumir facturas impagadas del mandato anterior, “hemos trabajado sin descanso para que Arico avance”.
El grupo de Coalición Canaria denunció la situación, atribuyendo el incumplimiento de la regla de gasto –cuantificado por CC en 693.642,00 euros– a una “política económica irresponsable”. El portavoz de CC, Víctor García, criticó el “retraso sistemático en el pago a proveedores” con media de 120 días, el “despilfarro de dinero público”, el incremento del gasto en fiestas y publicidad, y una subida salarial del gobierno del 36,8%.
Desde CC se advirtió que las medidas del PEF, como la actualización de tasas y precios públicos, el refuerzo de los sistemas de control tributario y gestión recaudatoria, la amortización selectiva de plazas y el control de las tasas de reposición del personal, la revisión de contratos y la planificación de inversiones con financiación externa y postergando otras, podrían “repercutir directamente en el bolsillo de los vecinos”.
Los nacionalistas instaron a que “el gobierno no cargue en los vecinos la mala gestión propia, subiendo impuestos en lugar de reducir las dramáticas subidas en salarios o fiestas”. Además, CC alertó que este nuevo escenario de limitación del gasto puede “poner en peligro” el aumento de las subvenciones a colectivos, así como la ejecución del Plan de Inversiones Municipal de la legislatura pasada, y exigió “explicaciones públicas” y la presentación urgente de un plan de actuación que garantice que “este ajuste no repercutirá en las familias y sectores más vulnerables, sin subir impuestos y reduciendo gastos superfluos”. García también recordó que la actual alcaldesa, en la oposición en 2016, criticó duramente una situación similar y exigió entonces “rigor, transparencia y control del gasto”.
El gobierno municipal, por su parte, replica que mientras otros municipios aprovecharon la suspensión de las reglas fiscales (2020-2022) para impulsar inversiones, “Arico se quedó atrás”, y que ahora se están “poniendo al día con seriedad, gestionando con responsabilidad y liderando con hechos”. Informaron que está en proceso la licitación de un nuevo contrato para el mantenimiento de espacios públicos, además de trabajos en las redes de agua.
Desde PSOE y PP indicaron que se ha llevado a cabo la repavimentación de calles en El Molino, La Degollada, El Cerradero y Las Paredes (La Sabinita). En cuanto a la Plaza de la Villa, señalaron que su situación, paralizada desde 2019 por fallos en el proyecto anterior, está en vías de solución tras el pago de una factura pendiente de 150.000 euros correspondiente a las obras realizadas ese año. Asimismo, destacaron el refuerzo en servicios de atención a la infancia y conciliación familiar, incluyendo la puesta en marcha de acogida temprana en colegios, permanencias y actividades como campamentos de verano y Navidad.
Pese a ello Arico sigue sin presupuesto para 2025, por lo que los nacionalistas aseguran que seguirán fiscalizando al gobierno, pues “temen” que las nuevas cuentas municipales presenten “números irreales” con un aumento de “ingresos ficticio” para intentar “vender un crecimiento que se ha demostrado que es falso”, han dicho.