Aunque el acuerdo alcanzado es menos ambicioso de lo que planteaba Podemos, Sabaté destaca el consenso insular en torno a este problema.
El Cabildo de Tenerife se implicará más activamente en el problema de vertido de plomo que afecta al Barranco de Ajabo (en Adeje) por la actividad de un campo de tiro de titularidad municipal que se encuentra ubicado en la localidad de Taucho, justo en la ladera de este paraje natural. En concreto, requerirá al Ayuntamiento de Adeje que solicite autorización de vertidos y que informe a las administraciones competentes sobre la situación resultante de ese trámite, medidas con las que la administración insular pretende dar cumplimiento a una moción del grupo insular de Podemos que reclama una solución definitiva al problema ambiental que está generando este campo de tiro en ese Barranco y en su entorno.
Fernando Sabaté, portavoz de la formación morada, explica que su grupo ha seguido de cerca este problema durante todo el mandato y que ha realizado varias peticiones de información y propuestas en el Cabildo. “Pero que los análisis realizados por el Consejo Insular de Aguas a petición de la asociación Amigos en defensa de Ajabo haya detectado presencia de plomo en uno de los pozos de agua aledaños al Barranco, ha terminado de encender las alarmas”. La cantidad detectada de ese material tóxico es inferior al límite legal marcado para consumo humano, “pero es la primera vez que se detecta plomo en una fuente de agua de esta Isla y no es razonable que administraciones como la insular esperen a que el problema se agrave para tomar medidas”.
Remarca que el acuerdo alcanzado en comisión plenaria de Sostenibilidad justo antes del periodo estival “no es tan ambicioso como planteaba nuestra formación, ya que en nuestra opinión lo que procede es, como mínimo, paralizar la actividad de este campo de tiro de titularidad municipal hasta que haya garantías plenas de que no existen riesgos de contaminación ni del acuífero ni de las aguas que circulan por este barranco hasta su desembocadura en el mar”.
Añade que la formación también planteó que se revoque la autorización otorgada a esta instalación al no cumplirse los requisitos de seguridad que la condicionan. Sin embargo, aclara, el consejero responsable del Consejo Insular de Agua, Manuel Martínez, estima que el Cabildo no tiene competencias para revocar ese permiso. Tras un amplio debate y negociaciones en torno a la moción presentada por Podemos, “es de destacar que lográramos consensuar un acuerdo que intensifique la implicación de la administración en este problema que no solo afecta al medio ambiente, sino también a la salud de población residente y turista”.
Esta moción es resultado de una visita realizada por varios integrantes del grupo insular, del Círculo de Podemos de Adeje y de Amigos en Defensa de Ajabo, colectivo que lleva años denunciando el problema de contaminación por plomo y ruido que afecta a este paraje. También es fruto de la información facilitada por la Asociación Tinerfeña de Amigos de la Naturaleza (ATAN).
Sobre la magnitud del problema, Sabaté apunta que se calcula que sólo en el mes de junio de 2015 se arrojaron al barranco media tonelada de plomo y unos 15.000 platos. “Es difícil determinar la cantidad de exacta de plomo que se acumula en el lugar, pero constituye un atentado ecológico evidente y un grave riesgo para la salud humana”. Y resalta el agravante de que las lluvias y la consiguiente escorrentía arrastran una parte de estos materiales por el cauce del Barranco hasta la playa de Ajabo, en Callao Salvaje. “Es de suponer que su contacto y difusión a través del agua facilita su incorporación a la fauna marina, y de ahí el riesgo de que acabe en el contenido del pescado que consume la población local y visitante”, concluye.
Por último, critica que a raíz de una denuncia de la Guardia Civil, la Subdelegación del Gobierno haya multado a un vecino que practicó el salto del pastor coincidiendo con una manifestación convocada por Amigos de Ajabo contra el vertido de plomo en el citado paraje. “Realmente increíble que muestren mayor preocupación por evitar la práctica del salto del pastor en el margen del Barranco, fuera de su zona de seguridad, como comprobó el consejero de Podemos Julio Concepción el día de la protesta, que por evitar el vertido de un material tan tóxico y contaminante como el plomo”.