El consejero de Movilidad del Cabildo de Tenerife y presidente de Titsa, Enrique Arriaga, destaca que “estos buenos resultados son posibles gracias a la implicación activa de sus trabajadores que reciben formación continua sobre cómo realizar de manera adecuada la separación de residuos para favorecer el reciclaje”.
Transportes Interurbanos de Tenerife (Titsa), empresa del Cabildo de Tenerife que depende del área de Movilidad, Carreteras e Innovación que dirige el consejero Enrique Arriaga, recicló el año pasado un total de 284.382 kilos de residuos, lo que supone un incremento del 9,5% con respecto al año anterior.
Del total de residuos generados, el 71% (202.880 kilos) eran peligrosos, lo que ha supuesto un incremento del 17,9% con respecto a 2018. El otro 29% (81.502 kilos) corresponde a residuos no peligrosos, que han descendido un 6,2%.
El consejero de Movilidad del Cabildo de Tenerife y presidente de Titsa, Enrique Arriaga, destaca que “estos buenos resultados son posibles gracias a la implicación activa de sus trabajadores que reciben formación continua sobre cómo realizar de manera adecuada la separación de residuos para favorecer el reciclaje”.
Por su parte, el director insular de Movilidad y gerente de la compañía, José Alberto León, asegura que “el objetivo de la compañía es ir reduciendo cada año los residuos generados gracias a la implementación y mejora de nuevos sistemas y a la continua incorporación de nuevos avances tecnológicos a las guaguas, como baterías de mayor duración o iluminación LED”.
En cuanto a residuos peligrosos, los lodos separadores de agua y sustancias aceitosas son los materiales que más se reciclan, con un total de 71.001 kilos, seguidos de aceites lubricantes con 60.450 kilos y líquido refrigerante, con 20.807 kilos.
Asimismo, también se hizo acopio de baterías usadas, papel sucio, trapos y demás absorbentes similares o combustibles, entre otros.
Como residuos no peligrosos, Titsa recicló 47.221 kilos de chatarra y 31.082 kilos de residuos sólidos urbanos, junto a equipos electrónicos, papel y cartón, entre otros.
El director Técnico de Titsa, Pedro Gómez, explica que estos datos “confirman una evolución positiva y han permitido a la compañía obtener diversas acreditaciones medioambientales de reconocimiento internacional, como la doble certificación de AENOR en Gestión Medioambiental UNE-EN ISO 14001:2015 y en Gestión de la Calidad de la norma UNE-EN ISO 9001:2015”.
La gestión de los residuos se realiza actualmente en las instalaciones de los talleres de Titsa y en ella participa todo el personal, ya que los procedimientos del Sistema de Gestión Ambiental obligan a separarlos para su posterior tratamiento y así reciclar el máximo posible, eliminando las posibilidades de realizar contaminaciones ambientales peligrosas y participando activamente en la mejora y en el respeto por el medio ambiente.
La compañía forma a sus trabajadores de manera continua en la gestión de los residuos y, además, ha implantado el método de las 5S: clasificación, orden, limpieza, estandarización y mantenimiento. Todo ello ha contribuido a la menor generación de desechos y a su mejor separación y tratamiento.
Titsa, consciente de que uno de los factores esenciales para su desarrollo es la calidad de su servicio y la prevención de la contaminación, ha dirigido estos esfuerzos en disponer de personal competente, medios materiales adecuados y proveedores compatibles con las políticas óptimas de calidad y medioambiente.
En este sentido, su actuación medioambiental sigue los principios de cumplimiento de la legislación vigente y aplicable en el ámbito europeo, nacional, autonómico y local en materia de medio ambiente.