En conjunto, las obras contempladas cuentan con una inversión que ronda los 2,5 millones de euros.
“En 33 años no se han realizado mejoras ni intervenciones de calado en instalaciones como la de Llanos de Mesa”, subraya el consejero insular de Agricultura, Ganadería y Pesca, Javier Parrilla.
La Consejería de Agricultura, Ganadería y Pesca del Cabildo de Tenerife, que dirige Javier Parrilla, ha puesto en marcha un plan de choque para llevar a cabo nuevas impermeabilizaciones en las balsas de la isla que así lo requieran. Este programa se desarrolla a través de Balsas de Tenerife (Balten) y se centrará en una primera fase en dos actuaciones, para las que se destinarán cerca de 1,4 millones de euros. Se trata de la balsa de Valle Molina, situada en Tegueste, y de Llanos de Mesa, en el término municipal de San Juan de la Rambla. Asimismo, se ha planificado, para el periodo 2020-2021, por un importe de 1,1 millones de euros, la reimpermeabilización de la balsa de Benijos, en La Orotava.
El consejero Javier Parrilla visitó recientemente, junto a la alcaldesa de San Juan de la Rambla, Fidela Velázquez, la balsa de Llanos de Mesa, donde la corporación insular tiene previsto ejecutar trabajos de reimpermeabilización de esta instalación hídrica para renovar sus prestaciones al concluir la vida útil de la actual membrana. La primera y única impermeabilización hasta la fecha de la balsa de Llanos de la Mesa concluyó en el año 1986.
Los servicios técnicos de Balten han elaborado un proyecto para reimpermeabilizar este recinto, cuyo presupuesto de licitación asciende a 663.507,39 euros. A falta de su adjudicación, las obras se estiman que concluyan en el primer semestre de 2020. La superficie que se quiere renovar es de 23.245 metros cuadrados.
El consejero insular de Agricultura remarca que la balsa de Llanos de Mesa “es un elemento fundamental en la contribución del agua de riego en los municipios de San Juan de la Rambla y La Guancha”. “En 33 años no se han realizado mejoras ni intervenciones de calado en estas instalaciones. Si bien el comportamiento de la lámina ha sido mejor del esperado, ha llegado al fin de su vida útil y conviene proceder a su sustitución. Además del propio mantenimiento debemos tener en cuenta que puede ser una de las claves fundamentales en el futuro para el circuito de agua regenerada de la isla”, sostiene Javier Parrilla.
En el caso de la balsa de Valle Molina, las obras de reimpermeabilización, que comenzaron el pasado septiembre, se centrarán en una superficie de 29.657 metros cuadrados. Los trabajos, que cuentan con un presupuesto de 651.099,71 euros, tienen un plazo de ejecución de cuatro meses y persiguen dar solución a la pantalla de impermeabilización debido al impacto de la granizada acaecida en el temporal del 25 de octubre de 2018. Además, la fecha de instalación de la geomembrana anterior es del año 1997.